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Nueve de Julio
martes, abril 23, 2024

Falleció el Doctor Walter Battistella

En las primeras horas de esta tarde se ha conocido la triste noticia del fallecimiento del Doctor Walter Battistella quien se encontraba, desde hace varios días, internado, en el difícil contexto de la pandemia de coronavirus. Apenas trascendió la penosa intormación de su deceso, un clima de generalizada consternación ha comenzado a sentirse en la comunidad; sobre todo en los muchos círculos sociales e institucionales con los cuales el extiendo se había vinculado en su extensa gestión pública.

Amigos, familiares y vecinos lloran la pérdida de un hombre de bien que trabajó por esta comunidad desde el cargo de intendente municipal, concejal y funcionario provincial.

UNA VIDA DE SERVICIO Y VOCACION

Walter Battistella había nacido el 9 de abril de 1958, en el hogar formado por Roberto Marcelino Battistella y Antonia Fermocelle. Si bien su nacimiento ocurrió en la ciudad de 9 de Julio, siendo su obstetra el recordado doctor Elido Bettinardi, su familia se encontraba radicada en la localidad de Facundo Quiroga, donde transcurrió buena parte de su infancia.

Sus estudios primarios los cursó en la Escuela Nº 13 y, al mismo tiempo, comenzó en plena infancia a conocer la importancia del trabajo. Desde los ocho años de edad había trabajado en la parroquia de Facundo Quiroga, como ayudante del entonces párroco José Rossell. Posteriormente, fue empleado en la herrería de Merino y Lanzi.

Cuando contaba 11 años se radicó junto a su familia en 9 de Julio y completó el séptimo grado en la Escuela Nº 3. En ese momento, su padre se había quedado sin trabajo en Quiroga, dado que la empresa donde él trabajaba había quebrado, entonces la familia decidió buscar nuevos horizontes a 9 de Julio.

En esos años, su familia instaló un restaurante, en la avenida Río Uruguay (hoy Tomás Cosentino) entre Tucumán y Cavallari, donde en su momento había existido el restaurante de Cattaini. Allí, Walter trabajó como mozo. Este emprendimiento familiar lo mantuvieron hasta que su padre consiguió un nuevo empleo en la empresa de ómnibus “El Caballito Criollo”.

Finalizados los estudios primarios, ingresó a la Escuela Nacional de Comercio. Comenzó el primer año en el antigüo edificio de la esquina de San Martín y Libertad y, cuando iniciaba el tercer curso pasó al nuevo edificio, donde hoy funciona la Escuela Normal Superior.

Desde siempre tuvo un firme sentido sobre la responsabilidad y un imperativo constante hacia la laboriosidad, tanto así que, mientras cursaba sus estudios secundarios realizó diferentes trabajos. Entre sus empleos pueden mencionarse el realizado en el antiguo mercado de Appella, como peón de albañil con Domingo Mariani y, posteriormente, en el taller mecánico de Seijo, donde comenzó trabajando en el sector administrativo y luego pasó a la sección de mecánica. Por ese tiempo, durante los fines de semana, también desempeñaba tareas de la confitería “Barrabás”, que por entonces se encontraba en la esquina de Libertad y La Rioja.

LA MEDICINA

La vocación hacia la medicina surgió, en la vida de Walter Battistella, cuando era todavía niño. En ese momento tenía muy cercana la imagen del médico de su pueblo, doctor Mario Secón, quien trabajaba denodadamente para resolver la mayoría de los problemas que se presentaban.

«En 1976 –recordaba, en una entrevista mantenida con EL 9 DE JULIO en 2011- finalicé los estudios secundarios con deseos de irme a estudiar. Había comenzado a realizar los trámites para ello, pero el ‘rodrigazo’ me impidió poder iniciarlos. El dólar se había incrementado en alrededor del 100%, y para un hogar de trabajadores era imposible sostener a un estudiante”

Luego  de haber obtenido la baja del Servicio Militar, comenzó a construir su casa en 9 de Julio hasta que inició su preparación para iniciar la carrera universitaria.

Walter Battistella ingresó en 1983 a la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata.

Tal como el propio doctor Battistella lo comentaba, “era una carrera sacrificada, puesto que en ese momento trabajaba como mozo y tenía solamente un franco por semana, los días miércoles”.

“El resto de los días volvía de madrugada y tenía poco tiempo para el descanso, ya que se cursaba a partir de las ocho de la mañana. El día de descanso semanal me permitía recuperarme”, recuerdaba Walter.

La carrera de Medicina la realizó en seis años. Finalizada la misma se trasladó a Neuquén Capital para efectuar la residencia en el Hospital “Bouquet Roldán”, uno de los centros más prestigiosos del país para las residencias en Medicina generalista. Para ese momento había rendido satisfactoriamente para ingresar en nosocomios de Buenos Aires y del Chubut, pero escogió la ciudad de Neuquén.

Una vez finalizada la residencia fue designado como director del hospital de Rincón de los Sauces, una localidad ubicada en el departamento de Pehuenches en el noreste de la provincia del Neuquén, en la margen derecha del río Colorado, a unos doscientos seis kilómetros de la capital provincial. Allí permaneció por espacio de un año y medio.

En 1994, volvió a Facundo Quiroga con la finalidad de reemplazar al doctor Secón quien se encontraba atravesando problemas de salud.

En 1999 se radicó definitivamente en esta ciudad. Aquí venía realizando los servicios de Guardia en el Hospital Zonal “Julio de Vedia”, en Clínica Oeste y en la Clínica Independencia.

Aún teniendo domicilio en 9 de Julio, hasta el año 2001 continuó viajando dos veces por semana a Quiroga para brindar su atención médica a la comunidad.

Después de haber finalizado, en 2001, su cargo de concejal volvió a desempeñarse como médico municipal. En el Hospital de la localidad de Dudignac ofició como médico pediatra; luego en las salas de primeros auxilios de Patricios, Barrio Luján, Barrio Parque Julio de Vedia y Diamantina. En esta última se produjo una vacante, cuando el doctor Lizarralde se acogió a los beneficios de la jubilación, siendo designado el doctor Battistella al frente de la misma hasta el año en que fuera elegido como intendente.

En la calle Salta entre Robbio y Libertad, el doctor Battistella, tiene actualmente su consultorio, en un moderno y confortable edificio.

LA ACTIVIDAD POLITICA

En 1995, decidió comenzar a militar en la Unión Cívica Radical. Enseguida fue postulado como candidato a concejal, cargo para el que fue elegido en 1997.

Entre 2001 y 2003 se desempeñó como presidente del Partido a nivel local.

En 2003 fue propuesto como candidato a intendente municipal por el Radicalismo. Más tarde, en octubre de 2005, tras el fallecimiento del intendente Martín Callegaro, fue llevado nuevamente como candidato, resultando elegido en esos comicios.

Desde el momento en que asumió la gestión municipal se propuso, como parte central de su plan de gobierno, “mejorar la calidad de vida de los nuevejulienses”. En ese sentido, entre otros emprendimientos, acometió la reorganización del servicio de Salud municipal, en los distintos efectores municipales; la ampliación del servicio de cloacas, la estructuración del trabajo de las cuadrillas municipales, la municipalización del servicio de barrido y limpieza, la construcción de varias cuadras de asfalto en frío, la recuperación de espacios verdes, la concreción de obras públicas en distintos barrios, la construcción de plazoletas, la adquisición de importantes maquinarias viales, las mejoras en las localidades del interior y la ampliación del radio de alumbrado público, entre otros emprendimientos interesantes.

En octubre de 2007 fue reelecto para el cargo de intendente municipal, y volvió a ser llamado a ese cargo por el electorado en 2011.

Tras finalizar su gestión como intendente municipal, en 2015, fue designado Director de la Región Sanitaria.

En 2019 había conformado una lista de candidato compitiendo en las elecciones municipales de este distrito.

SU FAMILIA

En diciembre de 1976 contrajo matrimonio con Sonia Iris Sorochar. De esa unión nacieron Carolina Noemí,  Nicolás Rubén y Sebastián Ricardo.

SU RECUERDO Y SU LEGADO

El fallecimiento de Walter Battistella sacude a la comunidad de 9 de Julio. Su nombre ya forma parte de la historia del Partido de 9 de Julio que lo recordará siempre.

Su trato siempre cortes, su sencillez y cordialidad, conjugado con una gran vocación de servicio son su más noble legado. Las obras que erigió en esta ciudad y en las localidades del interior del Partido son el reflejo de su preocupación por dar a los nuevejulienses una mejor calidad de vida.

El recuerdo de Walter quedará por siempre y, sin dudas, servirá como guía a las futuras generaciones que deseen seguir su ejemplo.

  • Datos biográficos: Archivo de Publicaciones Periodísticas de DIARIO EL 9 DE JULIO.

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