spot_img
spot_img
12.8 C
Nueve de Julio
jueves, abril 25, 2024

La zona de confort y sus incomodidades

Psicología

Está visto lo cómoda que resulta la zona de confort, por algo le decimos así. Es un espacio mental y vital donde nos sentimos seguros, en calma, todo nos parece estable y quizás hasta quieto. Hasta allí todo parece estar bien. Muchas veces hasta se necesita esta zona confortable, reconocida, para tomar aire en tiempos revueltos y volver a buscar desafíos cuando estemos más fuertes para enfrentarlos.
¿Pero qué pasa cuando ese espacio empieza a quedar pequeño? La molestia suele comenzar de a poco, una incomodidad que no cede, parece que cambiamos y no cambia nada, como si se viviera el mismo problema una y otra vez.
Muchas veces vemos a alguien cercano en este estado de sufrimiento pero sin poder salir de ahí. No importa cuánto le aconsejen y le repitan qué hacer, parece que no escuchara o que aun escuchando, hace lo mismo repetitivamente.
Esto sucede en parte porque frente la angustia, cuando es muy intensa, las personas suelen aferrarse a lo conocido, de la manera más rígida posible, pues el temor a perder ese faro es inmenso. Es importante entender que las ideas sobre lo que podría pasar si se suelta, en general son más terroríficas que la realidad misma. ¡Pero nadie lo recuerda en esos difíciles momentos! Se necesita tranquilidad mental para reorganizar el pensamiento y darse cuenta de estas y otras cosas que nos pueden parecer muy claras cuando no estamos en el ojo de la tormenta.
¿Y cuando se sabe todo esto pero igualmente algo se repite en nuestra vida más allá de nuestra voluntad? ¿Y si nos parece que hacemos todo para estar mejor pero no lo logramos? Cuando la persona toma conciencia de esto, es ideal que pueda pedir ayuda. En principio a cualquier lazo que le ayude a salir de ese círculo que parece interminable, y en muchos casos aunque hace bien hablar con amigos o familiares, se vuelve necesaria la consulta con un profesional.
Es que la piedra en el camino que sacamos y vuelve, vuelve de algún lado. Vuelve con alguna fuerza que no se entiende. Ahí estamos en terreno del trabajo analítico. Si el problema se origina más allá de nuestra voluntad, habrá que resolverlo sin apelar a ella.

Lic. Sabrina Valdez
MN 59064 MP 84332

Más noticias