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martes, abril 23, 2024

Atlético 9 de Julio lo dio vuelta ante Libertad y estiró su ventaja

[19 de julio de 2010] La lluvia permitió que se jugara un solo partido de la «A», el adelantado del sábado, que era también el más importante de la fecha, por su calidad de clásico y porque jugaba el puntero, Atlético 9 de Julio. Fue un partido cambiante y nada sencillo para el líder, que con varios cambios por suspensiones y lesiones debió dar vuelta el resultado en dos ocasiones.

Más allá de los vaivenes del encuentro y del marcador, desde el comienzo y en todo el partido fue el equipo que hacía de local en el Ramón N. Poratti el que manejó la pelota y tuvo las situaciones de gol.

Tras diez fríos primeros minutos, a los  10’, Pírez tuvo la primera ocasión, con un remate que se fue alto. Luego, fue Molteni el que amenazó el arco liberteño, con un disparo cerca de un palo. Y otra vez tras un centro de Malfatto, con  un cabezazo que se fue alto.

Asentado en un buen trabajo de su mediocampo, el equipo de Ferreyra generaba una situación tras otra. Emanuel Miraglia le sacó un tiro a quemarropa a Maccagnani, salvando su arco de  una segura caída. Después llegó el show de los palos: primero fue Pírez el que tras un tiro de esquina estrelló un cabezazo en  el primer palo, y nadie llegó al rebote de esa pelota que pareció cruzar en cámara lenta el arco de Vega. Y en  la siguiente jugada, otro centro al área lagunera que nadie llegó a cabecear con precisión volvió a impactar en un poste, esta vez el segundo del arco de Vega.

Libertad no generaba casi nada en ataque, pero hacia la media hora de juego, en su primera acción ofensiva, concretó en  la red, demostrando lo injusto que es el fútbol a veces: centro al área millonaria, y Zamprogna, con una desafortunada intervención la metió por sobre su propio arquero.

Atlético tardó un poco en reaccionar ante el golpe de mala suerte, pero lo hizo a los 38’, cuando Nievas le puso un pase en profundidad a Valentín Alvarez, que se fue solo ante Vega y definió con suavidad para poner el empate. Era justicia, y hubiera sido más si Maccagnani no se hubiera perdido el segundo en dos ocasiones bastante claras.

Pero no fue 9 de Julio el que amplió la ventaja, sino su clásico rival, antes de irse al descanso. Y si el primer gol de Libertad  pudo ser tildado de injusto, el segundo puede acharcarse también a un error defensivo de 9 de Julio. En una jugada preparada, Bustos tiró un centro que Emanuel Miraglia tocó con la punta del botín, entrando por detrás de la desprevenida defensa local, para una vez más marcar una diferencia a favor del equipo de Gómez, que tenía una  contundencia perfecta. Dos llegadas, dos goles, en 44 minutos.

Aunque ya en  tiempo de descuento, el visitante sufrió un duro golpe al perder de manera innecesaria un hombre: Scolari fue con la plancha contra un  rival, y el árbitro Márquez le mostró su segunda tarjeta amarila.

Por esta última jugada, pareció irse más tranquilo al vestuario 9 de Julio que Libertad. Porque los de Gómez sabían que si no lograban neutralizar algunas de esas jugadas netas de gol que su rival generaba, rápidamente todo se daría vuelta para ellos. Y los de Ferreyra sabían que con un jugador más, una defensa más asentada y apenas un poco más de suerte, si seguían jugando como lo estaban haciendo el partido sería de ellos.

Segundo tiempo

Ya a los 7 minutos del segundo tiempo, con Beraza por Elescano en la cancha, el líder del torneo había generado cinco claras ocasiones de gol: dos de Molteni, dos de Maccagnani,  una de Pírez. Todas encontraron a un Vega sólido –a veces casi heroico, futbolís- ticamente hablando- o les faltó la puntada final. Luego fue Valentín Alvarez –acaso la figura en un ataque por momentos lujoso- el que estuvo cerca, dejando tres rivales en el camino aunque sin  poder definir con comodidad.

¿Libertad?. Esta vez no generaba nada, ni siquiera tenía suerte. Tan sólo se le puede contar a favor una escapada de Mariani que cortó Malfatto cerca del área, pareció que con infracción. Pero el árbitro sacó amarilla al delantero por una supuesta simulación, en su fallo más dudoso de la tarde.

En el otro arco, se lo perdía Molteni de nuevo, pero en la siguiente jugada, Maccagnani no perdonó: picó solo a espaldas de sus marcadores, y definió perfectamente por arriba de la salida de Vega, con total tranquilidad. Iban 20, faltaba mucho y 9 de Julio intuía que no se le escaparía.

Zamprogna de cabeza y Maccagnani se perdieron el anhelado tercer gol. Y fue Beraza, a los 37’, el que decretó la ventaja, con un disparo contra un palo ante un Vega que esta vez no pudo salvar su arco.

Ya estaba la ventaja del lado de la lógica,  y del lado del mejor fútbol. Pero Valentín Alvarez, con un soberbio remate –potente y recto- desde fuera del área, venció una vez más la resistencia de Vega, para que Atlético decorara el resultado y justificara un poco más su enorme superioridad. Y para que el juvenil delantero se erigiera como la figura de un ataque que tuvo varios puntos altos. Antes y después de este gol, estuvo muy cerca  en dos ocasiones el goleador Maccagnani, sin dudas el que más ocasiones generó en el partido. Pero a esta altura eso era un detalle anecdótico. La noticia concreta y al mismo tiempo destacada fue que el clásico y el adelantado del sábado fueron para Atlético 9 de Julio, al que nadie podrá inquietar cuando la lluvia deje jugar el resto de la próxima fecha.

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