Por Héctor José Iaconis
A 150 años de las turbulentas elecciones municipales en 9 de Julio, celebradas bajo la sombra de la inestabilidad institucional y los rezagos de un alzamiento revolucionario del año anterior, las elecciones legislativas de este 2025 se erigen como una nueva prueba de la fortaleza democrática. Aunque separadas por un siglo y medio, ambas coyunturas comparten una tensión común: el desafío de garantizar legitimidad institucional en un clima de sospecha, confrontación y, a veces, ruptura. Las prácticas políticas de antaño —la continuidad de autoridades sin renovación, las protestas electorales, y el rol tutelar del Poder Ejecutivo provincial— ofrecen un prisma histórico desde el cual examinar el presente. En este breve artículo queremos evocar las elecciones de 1875 en clave local, rescatando sus actores, hechos y consecuencias.
INESTABILIDAD INSTITUCIONAL Y PRÓRROGA DE MANDATOS MUNICIPALES
El clima de anormalidad política imperante en la Provincia de Buenos Aires durante 1874 y 1875, particularmente en los partidos del oeste, imposibilitó el cumplimiento del calendario legal para la renovación de autoridades municipales. En el Partido de 9 de Julio, las elecciones previstas no pudieron concretarse debido a los efectos del movimiento revolucionario que había convulsionado la región hacia fines del año anterior. Como consecuencia, la Corporación Municipal continuó funcionando con los miembros en ejercicio, a pesar de que algunos de ellos habían participado activamente en la insurrección.
Por otra parte, el 25 de abril de 1875 habían sido convocadas elecciones legislativas. La mesa escrutadora fue integrada por los vecinos Alejandro Dorrego, Mariano Martínez, Gabriel Morales, Antonio Andrade y Anselmo Díaz, como titulares y Santos Roldán, Marcelino Castro, Carlos Parodi, Inocente Nuñez y Ricardo Saat.
En ese contexto de irregularidad institucional, el Poder Ejecutivo de la provincia ejerció su facultad de confirmar a funcionarios en sus cargos. Así, por decisión administrativa, fueron ratificados en sus funciones para el año 1875, Nicolás L. Robbio como Juez de Paz y Blas Tobal como Comandante Militar del partido, quienes ya venían desempeñando dichas funciones desde mediados del año anterior.

CONVOCATORIA ELECTORAL Y PROTESTAS AL RESULTADO
El 17 de abril de 1875, el gobierno provincial decretó la realización de elecciones municipales en toda la provincia, fijando como fecha el 16 de mayo. En el partido de 9 de Julio se llevó adelante el acto comicial en el plazo establecido; sin embargo, su resultado fue objetado. El Poder Ejecutivo, atendiendo las protestas, resolvió el 4 de junio adoptar el dictamen de su Asesor, quien indicó que los impugnantes debían señalar específicamente los nombres de los supuestos ausentes que habrían votado de manera irregular. Hasta tanto no se cumpliera ese requerimiento, la validez de la elección quedaba en suspenso.
Durante ese mismo año, se produjeron significativos movimientos internos en la Corporación Municipal. El 29 de mayo, tras desacuerdos con el Juez de Paz, Emilio Carballeda presentó su renuncia al cargo de secretario, que había ejercido durante ocho años. En su lugar fue designado interinamente el municipal suplente Doroteo Plot, quien fue confirmado en el cargo el 29 de agosto. En julio, la corporación sufrió además la pérdida del municipal titular Gregorio Godoy, fallecido durante el ejercicio de sus funciones.
NUEVA ELECCIÓN, ANULACIÓN DE LA ANTERIOR Y RESULTADOS
Dado que la elección de mayo permanecía impugnada y no había sido convalidada, el Poder Ejecutivo decretó el 26 de octubre una nueva convocatoria para el 7 de noviembre, disponiendo además la nulidad de los comicios anteriores. Se estableció que esta nueva elección debía renovar la totalidad de la Corporación Municipal, conforme a lo dispuesto en la ley electoral del 14 de agosto de 1821.
En la nueva elección participaron 243 votantes. Resultaron electos como municipales titulares, Blas Tobal y Nicolás Robbio (padre del Juez de Paz, Nicolás L. Robbio), ambos con 243 votos, y el mayor Guerrino J. Greni junto con Pastor Dorrego, con 174 sufragios. Como suplentes fueron elegidos Manuel Trejo y Bernardo Santiago, también con 174 votos. Otros candidatos obtuvieron menor cantidad de sufragios, entre ellos Gabriel Morales y Enrique Bigliani con 68 votos como titulares, y Alejo Grelo y Emilio Carballeda como suplentes, con 68 y 66 votos, respectivamente.
El Poder Ejecutivo recién se pronunció sobre esta segunda elección el 19 de febrero de 1876, resolviendo su anulación.
PALABRAS FINALES
Los procesos electorales locales han enfrentado a lo largo de su historia desafíos similares que trascienden las épocas. Las elecciones municipales de 1875 presentan notables paralelismos con las dinámicas políticas que caracterizan las elecciones de los tiempos modernos. La persistencia de conflictos postelectorales, las disputas sobre la legitimidad de los resultados, los cuestionamientos a los padrones electorales y los embates dirigidos a las falencias identificadas en la gestión municipal formaban parte de la realidad de 1875 y, en cierta medida, continúan estándolo en 2025.
BIBLIOGRAFIA Y FUENTES
– Archivo de la Cámara de Diputados de la Nación. Expediente 10-OV-1875, “Legislatura de la Provincia de Buenos Aires – Presenta copia del cuadro de los individuos que compondrán las mesas receptoras de votos en las elecciones del 25 de abril en la Provincia de Buenos Aires”. Buenos Aires, 1875. Disponible en: [https://apym.hcdn.gob.ar/expedientes](https://apym.hcdn.gob.ar/expedientes).
– Vita, Buenaventura N. Crónica Vecinal de Nueve de Julio. 1871-1877. Monografía inédita presentada al Segundo Concurso sobre la Historia de los Pueblos de la Provincia de Buenos Aires. 9 de Julio, 1947. Original mecanografiado inédito conservado en el Archivo Histórico de la Provincia de Buenos Aires.
– Barba, Fernando Enrique. Los autonomistas del 70: Auge y frustración de un movimiento provinciano con vocación nacional, Buenos Aires entre 1868 y 1878. Buenos Aires: Editorial Pleamar, 1976.