Ya comienzan a observarse en los escaparates de las tiendas de la ciudad, las prendas pertenecientes a la colección otoño-invierno, con los estilos, formas y colores que caracterizarán la nueva temporada. A propósito de las tendencias que se presentan en estos días , especialmente en moda masculina, EL 9 DE JULIO dialogó con Julio Bordone, propietario de «Julio Indumentaria», quien posee una sólida experiencia en el rubro.
El entrevistado, en primer término, explicó que, para la nueva temporada, «se sigue marcando una tendencia muy fuerte hacia los tejidos con texturas nobles, de origen natural, tales como el algodón, la lana, con una muy fuerte inserción de los hilados de modal y de bambú».
«Sobre estos tejidos -añadió- existen un desarrollo tecnológico muy importante, que le ofrece a las prendas una textura suave, pero a la vez resistente, abundante en colorido».
De acuerdo a lo indicado por Bordone, «en el desarrollo de las colecciones existe una mayor libertad, en tanto y en cuanto juegan con amalgamas de diferentes colores, con cuadros y estampados y con una presencia de hilos de algodón peruano».
Entre otros componentes de la nueva temporada, Julio mencionó para el caso de las camisas, los cuellos tipo Windsor, con detalles en los carterones y en los bolsillos, acentuando un estilo europeo.
En lo que refiere a los pantalones, refirió que «existen una fuerte propensión hacia el corderoy, con un desarrollo en telas de algodón, gabardina y cambas, entre otras, que poseen calidez y que son lavables».
Julio, por otra parte, anticipó que «se va a ver un buen desarrollo en camperas, con texturas que apuntan a ser térmicas y, al mismo tiempo, livianas». Para ello abundan las telas microselladas, con resistencia a la lluvia, en las cuales predominan diferentes variantes en el color.
En cuando al saco, sigue prevaleciendo la honda informal, con el corderoy, la pana y los detalles en cuadros. Puede decirse que, en todas las propuestas de esta temporada, hay una especial incidencia en los cuadros estampados.
«En muchos casos están volviendo las artesanías que se veían cuando las abuelas tejían los puloveres tomando lanas de distintos tipos, con detalles en ochos, aranes o trenzas», sugirió.
Tal como lo remarcó Julio, hoy existe «la posibilidad de que el cliente tenga la certeza de que, aquellos que elijan, tiene inserción en el mercado, porque se usa todo; dejando la libertad de que la persona se vista como le gusta».
En esta temporada, van a destacarse «las remeras con lindas estampas, las chombas de mangas largas en Piqué, en algodones microesmerilados, con rayas y colores que combinan lo terrozo de la temporada tradicional de invierno con colores ácidos y pasteles».
«Estamos en presencia de una temporada que nos va a permitir vestirnos a gusto para cada ocasión del día. Y, para quien tenga un acontecimiento especial, seguirá siendo indicador de elegancia, en el hombre, del traje obscuro y rayado, con camisa blanca, gemelos y, con absoluta libertad para la elección de la corbata, que da el toque de personalidad», afirmó.
MANTENIMIENTO DE LOS PRECIOS
En lo que respecta a los precios para la nueva temporada, Julio Bordone, entendió que «la industria de la indumentaria viene soportando desde un tiempo largo un desarrollo, en cuando a precios, que ha sido menor respecto de la inflación en otros artículos».
«Si bien pudo haber existido una movilidad que ronda el 15 o el 20 por ciento, la misma está por debajo de lo que ha sido el índice de inflación anual. En otras palabras, no se ha expresado, en el precio final al consumidor la realidad, porque hay un esfuerzo muy grande de la industria en mantener una actitud para que el producto llegue a todos, sin que el costo sea un condicionante», dijo.
PARA TENER EN CUENTA
Con vista a la renovación del guardarropas para la nueva temporada, EL 9 DE JULIO solicitó el consejo de Julio, quien recomendó «para la temporada de invierno el tradicional jean o pantalón de corderoy, como así también de gabardina en colores neutros».
«A partir de esos pantalones se pueden com binar dos o tres camisas de diferentes gamas de colores y la infaltable campera. Con las texturas que se vienen, que son térmicas, con tener en el guardarropas dos o tres pantalones, tres o cuatro camisas, una chomba de manga larga, algún buzo de friza, se estará en condiciones de hacer frente al invierno», concluyó.
