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Desarraigos arraigados

[16 de febrero de 2011]

* Por Sonia Elizalde.

El autor de estas hermosas palabras se llama Ignacio y dice: Desarraigo…esa extraña sensación de dolor que sentimos al ver lo que nos fue propio y hoy nos resulta extrañamente ajeno.

Cada uno de nosotros, por el motivo que fuere y, en cualquier instancia de su pasaje por la vida, sufrió o ha de sufrir por un desarraigo. Si bien el desarraigo es una palabra que, en primera instancia nos hace pensar en la lejanía física, la distancia que nos separa de un lugar al cual nos unen sentimientos, podemos hablar del desarraigo usando distintos puntos de vista. El desarraigo espiritual, moral, físico, amoroso, emocional, de pertenencia, de ubicación…entre otros tipos.

Con esta interesante introducción me gustaría expresar un poco del desarraigo que sentimos quienes partimos en busca de nuevos horizontes hacia la Capital, hacia el exterior o a cualquier lugar del planeta lejos de lo que más queremos en post de nuestro crecimiento, del cumplimiento de nuestras metas u objetivos, cuando lo logramos aun sentimos el sinsabor del desarraigo, y hablo de nostalgia y no de tristeza…que no es lo mismo, es la nostalgia de haber dejado algo para conseguir otra cosa mejor o no, depende de lo que queramos para nosotros.

Es tan difícil partir y proyectar una vida nueva en otro lugar donde debemos comenzar de nuevo y echar raíces, la fertilización de la tierra en este nuevo lugar es esencial para poder afrontar cada cambio que se presente de ahora en más, y parte de esos nutrientes seguro están potenciados por una formula mágica que proviene del apoyo de nuestras familias y amigos que quedan allá…y que nos alientan a seguir, a nuestras madres que con sus llamados diarios nos dan fuerzas; Y… aprobaste los parciales? Cómo te fue en la entrevista de trabajo?…le voy a rezar al Sagrado corazón y vas a ver que te van a llamar, además le conté a doña Porota la señora del mercadito de la otra cuadra y me dijo, no tengas dudas que a tu hijo le va a ir bien, con todo el esfuerzo que hace, seguro que todo va a salir bien, ah me olvidaba nena en el Chevallier de las 19 hs te mandé una encomienda con algunas cositas, entre otras cosas las milanesas de pollo que tanto te gustan, y los infaltables amigos que esperan el finde largo para comer un asadito y ponernos al día de todos los nuevos rumores que se corren por la ciudad. Este mágico universo que generan y generamos todos al irnos de nuestro lugar y desarraigarnos de lo que más amamos o bien de lo que conocíamos hasta ese momento hace que volvamos y luego tengamos que partir nuevamente, a seguir construyendo nuestras elecciones, creo que mi árbol tiene bien plantadas mis raíces en mi pueblo pero las ramas crecen y crecen lejos de allí sin perder la madera.

Cierro mi nota con una imagen que aparece ante mis ojos una y otra vez y que todos la hemos vivido intensamente en algún momento, una Terminal de ómnibus… los motores de los micros encendidos crujientes para salir, una familia reunida para despedir a ese ser que se va…para crecer , una madre cerrando la campera de su hijo hasta arriba para que no tome frío, y fundiéndose en un abrazo interminable que le deje un poquito de ese calor de madre que nos quisiéramos llevar siempre, los ojos y los sueños puestos en ese pasaje…que nos aleja de lo que amamos pero que nos enorgullece y que nos hace volver cada vez que podemos.

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