Talento y didáctica de una artista nuevejuliense
En la avenida Mitre entre Arturo Frondizi (ex Entre Ríos) y Edison (ex Jujuy) se levanta la señorial vivienda de la familia Mondelli.
Esa casa que, sin dudas, despierta el interés de muchas personas, nuevejulienses o no, reúne en sí misma una parte de la historia lugareña. Allí se conserva el escritorio secreter del doctor Tomás West, primer intendente de 9 de Julio; el piano y la biblioteca del exhimio maestro Alfredo Kluck, junto con sus notables arreglos corales; el legado de Luis Mondelli, mentor intelectual y ejecutor de obras públicas en la comunidad.
Pero, además de toda esa carga histórica, esa casa revela un hecho no menos importante: fue el espacio donde vivió en su juventud y desarrolló su arte la pintora y docente Celia Mondelli de Merico («Chela»). Y, esa la casa solariega donde, en la actualidad, vive junto a sus hermanos.
Construida hacia 1929 por encargo de Luis Mondelli, el proyecto correspondió al ingeniero Luis Herbín y la ejecución correspondió a la empresa constructora de Héctor Bai.
El 1º de marzo de 1930, Mondelli, junto a su esposa Celia Angélica West y Calderón y sus hijos establecieron allí su hogar.
Allí viven en la actualidad los hijos de Luis y de Celia, nietos del primer intendente municipal de 9 de Julio, el doctor Tomás West. Entre ellos se encuentra la mayor de los ocho hermanos, Celia Mondelli de Merico, artista plástica y profesora de arte.
Si bien, Celia, residió por espacio de varios años en Buenos Aires, fue en 9 de Julio donde realizó algunas de sus obras. Su atelier supo estar ubicado en esa legendaria casa. Allí, por ejemplo, en la década de 1940, pintó el retrato del general Julio de Vedia que, por casi siete décadas, pendió de una de las paredes del despacho oficial de los intendentes de 9 de Julio.
Nacida el 9 de Julio de 1916, sintió su vocación artística siendo apenas una niña. Sus estudios primarios los cursó en la Escuela Nº 1 y, más tarde, en el Colegio Cavallari.
SU FORMACION ACADEMICA
Contaba apenas 16 años cuando, Celia Mondelli, comenzó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de La Plata. En aquella ciudad vivían sus abuelos maternos, hecho que le facilitó su instalación allí.
La Escuela era una institución de reciente formación, pues había sido fundada en 1924 sobre la base material de la antigua Academia de Dibujo en el Museo de Ciencias Naturales.
En sus años de formación tuvo profesores de destacada trayectoria, entre quienes cabe mencionar al notable Fernán Félix de Amador, periodista y escritor, y el pintor Cleto Ciocchini.
En 1941 obtuvo el profesorado en Dibujo y, dos años más tarde, el de Pintura.
ARTISTA PLASTICA Y DOCENTE
No son pocos quienes recuerdan con gran placer las memorables clases de Celia Mondelli en la Escuela Nacional de Comercio de 9 de Julio, institución educativa a la que dedicó más de tres décadas.También fue profesora de Dibujo en el Instituto Jesús Sacramentado y en el Instituto Superior de Formación Docente.
En la ciudad de Buenos Aires también trabajó en diferentes establecimientos educacionales.
Casada con el crítico de arte Guido Merico, compartió con él su gusto por el arte.
En diciembre de 2009, en una muestra retrospectiva, fueron expuestos veintidós de sus obras, en óleo, pastel y acuarela. Se trató, en efecto de un momento muy emotivo, en el cual la docente, integrante del cuerpo de profesores fundadores de la ex Escuela Nacional de Comercio (hoy Escuela Normal Superior), pudo reencontrarse con muchos ex alumnos.
En esa oportunidad sus pinturas revelaron un encanto y una magia particular, un destello de luz interior reflejado en paisajes urbanos, en imágenes de flores y en algunos rincones especiales, como el del estudio del artista. La recorrida por esta interesante exposición, invitó al espectador a viajar en el tiempo, más allá del espacio y de las formas. Paisajes de Bolivia o del Parque, la bellísima acuarela titulada “Fuente de la Plaza Belgrano”, la vista de la calle Humberto Primo en Buenos Aires o las representaciones de los suburbios de San Telmo, conjugaron, equilibraron y amalgamaron esos aspectos tan sustanciales del arte: espacio, tiempo y forma.
EJEMPLO DE VIDA
Con sus casi 100 años, la profesora Celia Mondelli de Merico (“Chela”) es un ejemplo de vida. Una artista que, además de concebir el arte como ejecución de una obra, lo entendió como un medio para transmitir la belleza a través de didáctica.
En efecto, sus dotes de docente han despertado en muchos alumnos el interes por el cultivo del arte.
A la derecha: Retrato del General Julio de Vedia, pintado por Celia Mondelli en la década de 1940. El mismo fue inspirado en una fotografía que aún se conserva y que, Celia, tuvo la oportunidad de conocer en el palacete del doctor Mariano de Vedia y Mitre, descendiente del fundador de 9 de Julio.
La obra fue donada, por dos vecinos, para ser expuesta de forma permanente en el despacho oficial del intendente municipal. Después de casi 70 años de haber permanecido allí, por disposición de la gestión Battistella fue descolgado y enviado al Museo.
