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lunes, octubre 7, 2024

Historia de Santa Elena de Inchauspe

Al otro día  de la excelente fiesta por los cien años de Santa Elena entrevisté a  su dueño Don Adrián, quien cordialmente se prestó a narrarme la historia de la estancia. Sentados en el casco,  que data de 1943  y acompañados de buenos mates, conversamos durante más de una hora. La primer casa habitación, que es el actual escritorio se construyó en  1919,   fecha desde la cual tienen registros de lluvias en forma ininterrumpida. Los galpones donde están actualmente la herrería, el saladero de cueros y depósitos fueron construidos entre 1916 y 1917.
La historia de Santa Elena comienza alrededor de 1870 cuando el ferrocarril llegaba a Chivilcoy y para trasladarse hacia el Oeste había que hacerlo en diligencias.  Cerca de la actual estación de Cambaceres había una posta, llamada con el nombre que luego tomó la estancia, unos corrales de palo a pique y un mirador.  Las diligencias cambiaban caballos y los pasajeros paleaban la sed, el hambre y reponían fuerzas.
El anterior dueño de estas tierras,  Manuel Du- rán, vendió en 1916 a Pedro Inchauspe y hermanos 3 y media leguas cuadradas que en la actualidad sigue perteneciendo a diferentes ramas de la familia.
El primer administrador fue el hermano de Pedro, Arnaud quien se trasladaba hacia Santa Elena  y luego seguía viaje hacia Pehuajó y Trenque Lauquen donde estaba la estancia La Margarita donde los Inchauspe hacian base. El origen de la fortuna de esta familia de vascos franceses Inchauspé, luego con los años perdió el acento, fue el negocio gastronómico ya que tenían confiterías en Buenos Aires.
En 1936 comenzó a administrar Don Andrés Inchauspe en la época cuando la famila era considerada entre los más eficientes invernadores de la Argentina. Con los años, durante los 70,  fueron incrementando la agricultura que hoy ocupa el 50 % de la superficie.  En 1989 instalaron el primer tambo y en 1992 el segundo, hoy junto a Estancia El Jabalí son los principales productores de leche del partido.
Pertenecen al CREA de 9 de julio desde 1981 y siempre han valorado la innovación y la excelencia como metas de la empresa y consideran a su personal como el capital más valioso, dedicándose a formar excelentes equipos tanto de manejo como de administración. Han tomado al campo como una empresa, despojándose de las emociones, enfatizó Don Adrian varias veces. Agregó que hoy siguen considerando la innovación y la excelencia como prioritarias y son muy entusiastas de  la agricultura de precisión, que realizan por administración,  aplicando semillas, fertilizantes y herbicidas en dosis variables tratando de buscar los mejores resultados.
Desde 1978 al 2005 el administrador fue Don Carlos Sastre, quien fue el que introdujo la raza Limousin a la Argentina y fue, según Don Adrian, un excelente administrador muy consustanciado con el espíritu innovador de los Inchauspe. El fue el que inventó al principio de los años 80 el pasa-eléctricos para camionetas y automóviles, ahora tan preponderante en todo el campo Argentino.
Don Adrian , nieto de Don Andrés vive en Boston y trabaja en el famoso instituto MIT,  junto con Harvard, las dos más famosas Universidades de EE.UU. Es investigador y en la actualidad trabaja en desarrollar biocombustibles a partir de deshechos. * Por Eduardo Gallo Llorente
[email protected]

¡Feliz cumple Santa Elena!
Santa Elena estancia gaucha
que hoy cumpliste los cien años
de pichón recorrí esos campos
y en la distancia te extraño,
ayer estuve en tu cumple
compartiendo y festejando
mientras que iba pensando
los años como han volado
el tambo viejo no existe
ya no hay terneros balando.

No he visto la caballada
encerrada en el corral
ni tampoco vi el nochero
masticando en el morral,
muchas cosas están igual
aunque otras hayan cambiado
y mirando a los costados
se veía todo limpito
mientras que atrás del galpón
se iba haciendo el asadito.

Después de una misa gaucha
tomó las riendas Mireya
aunque el sol estaba picante
a él no le hacía ni meya,
como buen animador
le dio entrada a las tropillas,
sí que fue una maravilla
lo que hizo cada paisano,
cada uno con su madrina
llevándola de la mano.

Una hermosa jovencita
montada sobre un un gateao
haciendo punta venía
con la bandera a un costao
en las manos femeninas
flameaba nuestra bandera,
pero se ve más entera
y flamea con más elegancia
si al pasearla de a caballo,
flamea en alguna estancia.

Después jugaron al pato
eso fue espectacular
la gente aplaudía los goles
nadie se quería marchar
luego vino la sortija
pa´cerrar la tardecita
al llegar la nochecita
se acabó la polvareda,
y lo escuchamos a Saravia
cantar zambas y chacareras.

Así festejó sus cien años
esta linda estancia gauchaza
comiendo un asao´con cuero
cada uno enfiló a su casa.
Con estancias como ésta
la tradición se agiganta
sale de cada garganta
un Viva la Patria hermano!
vivirá nuestra tradición
en cada estancia y paisano.

Dios bendiga a los patrones
Juana Inchauspe y su hijo Adrián
fiestas gauchas como ésta
todos los días se dan,
con alegría y sencillez
cada ex empleado saludando
y con todos conversando
de tiempos que ya se han ido,
¡feliz cumple Santa Elena
por los cien años cumplidos.!
Con cariño para
la gauchaza
Estancia «Santa Elena»
en su centenario.
Omar Figueiras.
9 de Julio- 9-3-2016

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