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Nueve de Julio
viernes, marzo 29, 2024

Se cumple un nuevo aniversario del fallecimiento de Jesús Blanco

Han transcurrido siete años desde su partida y, para muchos, el tiempo parece no haber pasado, Incluso, hay a quienes aún les cuesta comprender, hacerse a la idea de que Jesús Abel Blanco, “Don Jesús”  para muchos, ya no está físicamente.
Es que, más allá de los ideales políticos que cada quien abrace, la figura de Blanco es señera; y resulta difícil entender un 9 de Julio sin Blanco.Blanco + chica (1)
Un hombre que abrazó su destino. En un largo camino, a través de una firme vocación de servicio y  con la mirada puesta en las necesidades de su gente, tuvo la capacidad de ver más allá de las apariencia; de hallar lo verdadero en la profundidad de cada persona y de hacerse uno más entre todos.
Tuvo, ese hombre, la genialidad de quien conduce con acierto y, sobre todo, mantuvo siempre su oído y sus brazos al servicio de los más necesidados.
Jesús Abel Blanco, había nacido en 9 de Julio, el 20 de agosto de 1926, en un edificio de Tucumán y Santiago del Estero. Fueron sus padres, Tito Blanco, natural de Oviedo, en Asturias, y Manuela Nieto, de Andavías, en Zamora; es decir, ambos españoles.
A comienzos de 1946, Jesús Blanco, fue convocado para desempeñarse como auxiliar del Agente Fiscalizador de la ex-concesionaria del servicio eléctrico local, Compañía de Electricidad del Sud Argentino. Esta vez, con motivo de una investigación dispuesta por la municipalidad.
Ese año, el 23 de septiembre, recién cumplida la edad de 20 años, era llamado por Germán H. Camou, a la sazón comisionado municipal, para ocupar el cargo de secretario adscrito del   departamento ejecutivo. Estas funciones las prosiguió junto a los comisionados que sucedieron, doctores Armando Doménech y Victorio Piccinalli.
El 1º de mayo de 1948, el intendente municipal, Mario B. Castro, le designó su subsecretario de gobierno. Funciones en las que hubo permanecido hasta el 30 de abril de 1952.
A partir de entonces, 1952, se incorporó definitivamente a la Usina Eléctrica Popular «Mariano Moreno». En esta, ya venía desarrollando tareas provisorias desde agosto del año anterior… En marzo de 1990, después de 45 años de aportes, al régimen previsional, dejaba la cooperativa para acogerse a los beneficios de la jubilación.
Entre 1950 y 1952, fue secretario general del sindicato de Obreros y Empleados Municipales de 9 de Julio.
Algunos años después, ya componiendo el personal de la Usina, en 1956, fue elegido miembro de la comisión directiva del sindicado de Luz y Fuerza de Mercedes. En este mismo lugar, entre 1960 y 1965, pudo ser secretario de la seccional 9 de Julio y secretario general del sindicato, en Mercedes.
En 1968 fue elegido subsecretario general de la Federación Argentina de Luz y Fuerza (FATLYF); y, un año después, presidente de la comisión provisoria de la Central Interamericana de Trabajadores de Luz y Fuerza (CITLYF).
En razón de su actividad sindical, sintió el impulso para realizar sus estudios secundarios. En 1968, recibió el título de Perito Mercantil, en la Escuela Nacional de Comercio, después de rendir sesenta y tres asignaturas, en forma libre.
En 1969, ingresó a la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, principiando la carrera de abogacía y procuración, también con la modalidad de alumno libre. Estos estudios debió suspenderlos, en 1973, con ocasión de haber sido electo  intendente municipal de 9 de Julio.
Fue deportista, practicó fútbol  en Atlético 9 de Julio y en el Club, Biblioteca Agustín Alvarez  y Club Juventud Unida y ciclismo. Entre 1952 y 1954, presidió la Liga Nuevejuliense de Fútbol.
Otras actividades sociales, las desarrolló como miembros de la junta ejecutiva del Centro Privado de Rehabilitación del Lisiado, desde 1958 hasta 1985, al principio, acompañando a don Manuel Viegas y a su esposa Josefina Yacobino; y en la de vicepresidente de la filial 9 de Julio, de la Liga Argentina de Lucha Contra el Cáncer, entre 1982 y 1991.

EL PARTIDO JUSTICIALISTA

Desde muy jovencito Blanco, solía visitar la quinta de la familia Picotto. Allí, una mañana, mientras desayunaba, escuchó a través de una radio, el discurso de un orador de tono grave, al que siguió un grito, desde el público: «Viva el sindicato de Luz y Fuerza». Quien hablaba era el coronel Perón, y entre los trabajadores que le escuchaban, en esa asamblea, transmitida por la radiofonía, se hallaban los obreros de Luz y Fuerza.
Ese púber no imaginaba, siquiera, cuánto significarían aquellos nombres -que se acercaba por vez primera- en su vida.
Su protagonismo, en la militancia justicialista, comenzará a principios de la década de 1960. Pues, en 1962, era elegido intendente municipal. Entre 1964 y 1966, fue elegido presidente del consejo del Partido Justicialista de 9 de Julio; cargo que volvió a desempeñar, en los períodos de 1971-1973 y 1983-1985. Entre 1986 y 1988 fue secretario de organización del partido, en la provincia de Buenos Aires. Por esos años, debió presenciar un seminario sobre Política Internacional, promovido por la ADCA, en Caracas, Venezuela.
Integró el consejo nacional del partido, entre 1988 y 1991. Desde 1996, volvió a la dirigencia provincial partidaria. Al principio, como secretario general; y luego en calidad de  secretario de relaciones institucionales.

EN LAS FUNCIONES  EJECUTIVAS Y DELIBERATIVAS EN 9 DE JULIO

El 18 de marzo de 1962, fue elegido intendente municipal del partido de 9 de Julio. Al ser derrocado el gobierno del doctor Frondizi, los actos electorales fueron anulados. En consecuencia, Blanco no pudo asumir la jefatura comunal, para la cual había sido elegido.
Hacia 1963, fue nuevamente candidato. Esta vez, el peronismo fue proscrito, razón que le obligó a quedar fuera de los comicios.
Transcurridos dos años, se le confirió una banca en el Concejo Deliberante local, para el período que debía concluir en 1969. Pero, en 1966, el golpe militar del general Ongania, puso fin a las instituciones democráticas.
En 1973, Blanco, resultó electo intendente municipal. Aunque su mandato debía concluir en 1977, el 24 de marzo de 1976, terminó con el advenimiento del llamado «Proceso de Reorganización Nacional».
En 1991, el voto popular volvió a llamarlo para el ejercicio de la intendencia municipal. A esta, siguieron dos nuevas reelecciones, para los ciclos de 1995-1999 y 1999-2003.
Aún cuando podía pensar en el merecido descanso, cuando ya había pasado los ochenta años, continuó con la mirada puesta en el bienestar de su pueblo. En octubre de 2007 volvió a postularse para el cargo de intendente municipal. Aún retirado en su hogar continuaba atendiendo las necesidades de muchos nuevejulienses que llamaban a su puerta. Siempre tenía tiempo, sea cual fuere la hora del día, para prestar su ayuda a quienes  lo solicitaran.

DOS VECES DIPUTADO NACIONAL
En 1985 fue elegido diputado nacional, mandato que debió finalizar en 1989. En este sentido, integró las comisiones de Energía, Presupuesto y Hacienda, Familia, Mujer y Minoridad, ejerciendo la vicepresidencia de la de Comunicaciones. Cabe señalar que, en 1994, ocasión de la reforma de la Carta Magna, Jesús Blanco fue elegido convencional constituyente. Después de obtener licencia a su cargo de intendente entre 2001 y 2005 volvió a ocupar una banca en la legislatura nacional, como diputado.

SU RECUERDO

La historia de la vida política de 9 de Julio, especialmente en las últimas cuatro décadas ha tenido a Jesús Blanco como uno de sus protagonistas más destacados. Habrá, en el futuro, de estudiarse y escribirse la historia de estas décadas y, el nombre de Blanco estará allí, presente.
Jesús Blanco ya es parte de la historia, sus obras son el más encumbrado legado que un hombre puede dejar  a sus conciudadanos. Y Blanco dejó un mensaje, una huella, una luz  para el futuro. Datos biográficos del Archivo de Publicaciones de Diario EL 9 DE JULIO)

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