Las historias de engaños, en ocasión de robo, no dejan de llamar la atención, ni de sorprender a propios ni extraños. Esta madrugada fue víctima una vecina y es bueno estar alerta para evitar que estas situaciones le puedan ocurrir a otras personas.
Esta madrugada a la hora 2 golpearon la ventana en una vivienda de calle Lagos Nº 1027, entre Salta y San Martín, resultando damnificada Susana Moro de Vadillo.
Una mujer se hacía pasar por una doctora (dieron nombre y apellido de una profesional de nuestro medio) manifestando que a su hijo (Roberto Vadillo) lo habían internado de urgencia y necesitaba pertenencias para llevarle a la Clínica.
Le argumentó esta impostora a la vecina que su hijo necesitaba pertenencias y que su hija no había podido ir a buscarlas porque se encontraba acompañando a su hermano. Como la falsa médica dio datos precisos de los nombres de los integrantes de la familia, la convenció y la vecina le abrió la puerta.
Cuando le manifestó que habían dejado la ambulancia en la esquina, la vecina sospechó y llamó por teléfono a su hija para preguntarle por la salud de su hijo. Cuando supo del engaño y volvió al lugar, la ladrona se había ido.
Ante el llamado a la Policía, los atendió Marisol Ciancia quien procedió al envío de efectivos. Rápidamente, en tres minutos se encontraban en el lugar el Oficial Durán y el Subcomisario Bautista.
La señora revisó el lugar y de un lugar que ni sus propios hijos sabían dónde guardaba el dinero, comprobó que la delincuente le llevó $ 2000 de la jubilación.
Roberto Vadillo agradece a la Policía por actuar con rapidez y por sus consejos. «Estuvieron muy bien» comentó a «EL 9 DE JULIO».
