spot_img
spot_img
16.7 C
Nueve de Julio
viernes, abril 19, 2024

Mucha gente concurrió a la celebración realizada en Olascoaga

En Olascoaga, localidad perteneciente al Partido de Bragado, durante la jornada del domingo 5 se celebró la fiesta de la Pacha Mama organizada por la antigua Comunidad Mapuche Melinao.

La Madre tierra, considerada como quién hace crecer las cosechas, multiplica el ganado, cuida a los animales, ayuda a tejedores, alfareros y a la gente que trabaja la tierra. Esta fiesta que se celebra cada 1° de agosto, se conmemoró en Olascoaga, ayer domingo desde la mañana.
A medida que la gente iba arribando al lugar, eran recibidos con siete sorbos de caña con ruda, una tradición que originariamente es de los pueblos guaraníes y que según la creencia, asegura la salud para todo el año. Entre las comunidades presentes se encontraban referentes de las comunidades de Los Toldos, Junín, 9 de Julio y Buenos Aires. Además, la celebración contó con la presencia de Máximo Coñequir, uno de los máximos referentes de la descendencia mapuche en el lugar y en la zona.
Las autoridades municipales de Bragado también se hicieron presentes, representadas por el Presidente del Concejo Deliberante Gerardo Cabail; el Secretario de Gobierno y Coordinación de Gabinete, Sergio Fuente; el Secretario de Hacienda Control de Gestión y Patrimonio Raúl Latasa; el Secretario de Desarrollo Económico Planificación Estratégica, Producción, Empleo y Turismo Armando Alfonso, El Secretario de Obras Públicas Raúl Di Marco, la Secretaria de Desarrollo Social Julia Fernández, el Director de Deporte y Recreación Juan Abelando, el Director de Seguridad Jorge Peña, el Director de Tránsito Bernardo Coronel, el Subdirector de Asistencia a la Víctima Julio Sciascio, la Subdirectora de Turismo Susana Vezzoso, el Subdirector de Prensa Horacio García, la Delegada de Olascoaga Claudia Juanico y el edil Daniel Alianiello.
LA CEREMONIA…
La ceremonia dio inicio con las palabras de saludo del Lonco Máximo Coñequir, a los niños, niñas, a los presentes, a los loncos, autoridades y ancianos. Junto a los loncos de las comunidades de Junín y de Los Toldos, como así también a las ñañas, se procedió al pozo, el cual se convertirá en la boca por la que comerá la Pacha.
El pozo, donde se entregan las ofrendas a la madre tierra, es abierto año tras año en el mismo lugar. Este año fue de buen augurio, en principio los alimentos entregados el año anterior habían sido consumidos en su totalidad por la Pacha, pero también durante la apertura del pozo apareció una gran lombriz, de las denominadas “víbora ciega” lo que revela que la tierra está muy buena y augura un buen año.
Al pozo se le coloca carbón, el cual contribuye a que la madre tierra pueda alimentarse, al cual se le agrega laurel para sahumar, con el simbolismo de la apertura del vientre de la madre tierra, mientras que se lo tapa con un mapui (poncho) para que el vientre de la madre tierra descanse.
Una vez abierto y mientras es sahumado el pozo, la comunidad comienza a girar en pareja (un hombre y una mujer) en sentido opuesto a las agujas del reloj, mientras se saluda con un grito ya que los pueblos originarios no aplauden realizan un grito donde se expresa “10 veces venceremos, 10 veces volveremos, 10 veces renaceremos”, en una claro mensaje de unión e igualdad entre todos los “che” (personas).
Posteriormente se procede a las ofrendas, entre los elementos que se entregan se encuentran, laurel, frutas, semillas de maíz, semillas de girasol, pan, zapallo, polenta, harina, vino, cigarrillos. El mensaje es de agradecimiento, no solo por lo bueno que ha pasado este año, sino también por lo malo, ya que es símbolo de aprendizaje.
La pachamama es una fiesta muy importante ya que guarda un gran tesoro cultural siendo tal vez la más antigua ancestralmente de las religiones humanas, y la que ha logrado sobrevivir a los grandes cambios culturales.
Esta veneración se acompaña también con ceremonias religiosas de profunda raigambre y de hondo sentir tradicional: los amontonamientos de piedra llamados apachetas que tienen un doble sentido: guiar a los viajeros y ser un altar en el cual se dejan las ofrenda. Estas apachetas son bien recibidas por la Madre Pacha que ayudará a los peregrinos a llegar a destino sin inconvenientes.
Luego de la ceremonia todos los presentes compartieron un almuerzo y disfrutaron por la tarde de la feria artesanal y los espectáculos musicales.

(Fuente: Allignani, Esteban -La Voz de Bragado) 

Más noticias