PROMOCION DE MAESTRA 1964
COLEGIO JESUS SACRAMENTADO
Mirta E. Barreau, Teodora M. Basualdo, Susana Elba Becce, Elena M. Cappelletti, María E. Conde, Lilián E. Figueroa, Silvia M. Giacomino, Noemí S .Giuliani, Isabel M. Herrero, Haydeé R. Yacomet, María A. López, Angela Mazzoni, Rosa J. Moretti, María del C. Muñoz, Amalia E. Nacusse, Beatriz E. Orella, Elvira M. Pardo, Gilda H. Pesareci, Ana M. Pieroni, Hilda Noemí Qüin, Ana María Rebottaro, María Antonia Rebottaro, Irma Rodríguez, Lucía Juana San Romé, Inés Carmen Toledo, María Teresa Vicente
Hace muchos años atrás los 30 de noviembre eran sinónimo de fin de clases y comienzo de las vacaciones escolares. Pero, aquel 30 de noviembre de 1964 no fue una finalización más, fue el cierre de un ciclo secundario en el que egresamos como docentes, éramos MAESTRAS.
Hoy, 60 años después, festejamos porque fuimos, somos y seremos siempre MAESTRAS. Festejamos la vocación, ese estado interior que envolvimos durante mucho tiempo con guardapolvos cuadrille, delantales blancos, trajes o vestimenta que nos distinguía en el nivel educativo elegido y para el que nos capacitamos.
Esa vocación nos llevó a potenciar nuestra profesión, ser más aptos. Nos llenó de pasión para tratar de ser mejores y dar respuesta al educando no sólo en el manejo de un saber técnico y/o científico sino en la comunicación y empatía.
Promoción 1964 del Colegio Jesús Sacramentado, volver personalmente a este querido Colegio es un regalo de Dios. Será como remover su edificio, ahondar en su superficie buscando rastros de un tiempo que se fue.
Será como volver al nido donde nos gestamos Docentes, volver a mirarnos queriendo encontrar aquellos destellos adolescentes, esa mueca que nos caracterizaba, ese timbre de voz o forma de reír que resuena en la memoria de cada una.
Vamos a querer sacudir el TIEMPO para que caigan los recuerdos como frutos de un árbol, descubriremos cómo la existencia no pasa en vano: pinta de color plata los cabellos, escribe gestos en el rostro dejando marcas, calma impulsos en la marcha, aumenta sabidurías con las vivencias, fortalece el templo con resiliencia.
Juntas recorreremos aulas, patios con asombro porque ellos también cambiaron.
Agradeceremos a esta Comunidad Religiosa por seguir con fidelidad la obra de las Siervas fundadoras y en la Capilla daremos gracias a Jesús Sacramentado por transformar nuestros corazones y ser personas de FE.
Nos parece escuchar la campana, escuchen…esta visita ha llegado a su fin.
Gracias querido Colegio por lo vivido y aprendido, seguiremos caminando el presente, con el recuerdo de las compañeras ausentes y las que han partido de este mundo.
60 años no son nada!!!
ROSITA MORETI- EXALUMNA PROMOCION 1964-
COLEGIO JESUS SACRAMENTADO.