Días pasados, en Junín, la doctora Susana Aguilar, médica especialista en dermatología de esta ciudad, participó de una importante reunión acerca de psoriasis o soriasis. La misma fue organizada por la Sociedad Latinoamericana de Psoriasis (SOLAPSO) conjuntamente con un grupo de reumatólogos que se encuentran trabajando con pacientes que padecen la aludida patología.
En la oportunidad, entre otros profesionales, se contó con la presencia de la Doctora Nora Kogan, vicepresidente de la comisión directiva de SOLAPSO
En diálogo con EL 9 DE JULIO, la doctora Susana Aguilar, explicó que «la psoriasis tiene dos facetas, la dermatológica y la reumatológica, las cuales son tratadas por separado». En efecto, «puede estar asociada la afectación de la piel con la afectación de las articulaciones».
Al respecto, la entrevistada destacó «la importancia que reviste llegar a un consenso entre los especialistas reumatólogos y los dermatólogos para tratar a un paciente con una patología que comparten».
MEDICAMENTOS REVOLUCIONARIOS
La doctora Aguilar refirió que, en las reuniones, «son presentados casos clínicos, se estudian los adelantos en materia terapéutica, también se habla acerca de las enfermedades que se asociación a la soriasis o acompañan al paciente que padece la misma». Uno de los temas, sin dudas, más abordados es el de los medicamentos que tienen inferencia en la terapéutica.
Tal como lo indicó la doctora Aguilar, «en los últimos quince años, en que aparecieron los medicamentos denominados biológicos, ha existido u antes y un después en el tratamiento de la psoriasis, una enfermedad de las primeras en ser descriptas que hasta entonces tenía poca o casi nula resolución y en algunos casos de evolución incierta».
«Estos medicamentos -añadió- nuevos, entre las ventajadas que poseen, se encuentra la de prevenir la artropatía, es decir, la enfermedad de las articulaciones provocada por la soriasis».
En la misma línea, la especialista subrayó «la relevancia de estos nuevos medicamentos, muchos de los cuales son casi desconocidos; más aún, muchos médicos desconocen los alcances de los mismos y las posibilidades que brindan al pacientes de solucionar su problema de una forma casi definitiva».
UNA ENFERMEDAD COMPLEJA
La doctora Aguilar, al referirse a las características de esta enfermedad, comentó que «no existen signos o síntomas de alerta que puedan prevenir la soriasis; por el contrario, el una enfermedad que se manifiesta de una vez con toda su intensidad, sea leve, moderada severa o muy severa, presentando los tres fundamentos básicos de la patología: la aparición del eritema, es decir, el enrojecimiento de la piel, la induración de las placas y la descamación».
Existen diferentes formas clínicas de soriasis y, para cada caso, las diferentes formas para tratarlas. Cabe destacar que, el paciente soriásico acarrea muchas cuestiones, tales como la estigmatización frente a su enfermedad, el acomplejamiento y el retraimiento social, afectando sus relaciones interpersonales.
«Tengo pacientes -dijo- que atiendo desde hace más de treinta años y puedo asegurar que los medicamentos biológicos para el tratamiento de la soriasis les han cambiando la vida de forma favorable. Hay pacientes que después de sufrir esta enfermedad estigmatizante ahora se ven sin nada».
La profesional dejó en claro que, los medicamentos biológicos, «requieren un control estricto, antes, durante y después del tratamiento, por ello es muy importante realizar un buen diagnóstico del paciente».
«Estos medicamentos se aplican por vía inyectable, pero ha salido al mercado recientemente un antisoriásico biológico oral, que no tardará en llegar a la Argentina, porque hay un laboratorio que ya compró la importación del mismo y anticipa que llegaría para antes de fin de año», anticipó.
