Amigas y amigos, con alegría les cuento de mi último viaje a Chile. Uno de los desafío más importantes y más hermosos de mi vida.
Durante marzo, di en la Universidad de Chile un curso sobre la décima como profesor extranjero invitado, en el Departamento de Literatura de la Facultad de Filosofía y Humanidades. Llevo algunos años compartiendo el ámbito estudiantil, dando charlas y recitales en universidades de América y Europa y me encanta.
Pero lo que más me alegra, es haber hecho el esfuerzo de aprender a escribir artículos sobre la improvisación. No es poca cosa disciplinar su pluma para alguien que escribía de una manera anárquica, con unas sintaxis y ortografía desastrosas, aprender a indagar con cierto rigor y luego tratar de comunicarlo de manera ordenada. La profesora Ana María Baeza necesitaba un improvisador extranjero que tuviera artículos publicados y así llegó este momento que tanto agradezco.
Es una posibilidad muy importante de crecimiento para mí, preparar, compartir y dar este curso de un mes en una universidad extrajera.
Además di recitales en Santiago, Quillota, Pucón y Chimbarongo.