El Defensor del Pueblo de la Provincia, Carlos Bonicatto, advirtió ayer en Junín sobre un «aumento de episodios de violencia de género, atribuible, quizá, a la visibilización de casos que ya existían y permanecían en las sombras» y sostuvo que «debemos luchar contra una estructura cultural de muchos años que provoca mucho daño, angustia y problemas».
Bonicatto habló en la apertura de las jornadas de fortalecimiento de buenas prácticas de las mesas locales de violencia de género, en el Aula Magna de la Universidad del Noroeste bonaerense (Unnoba).
Explicó que la Defensoría, a través del Observatorio de Violencia de Género (OVG) está recorriendo la Provincia «para trabajar directamente» con las mesas locales en cada distrito, y en ese marco «analizamos las fortalezas y debilidades de cómo se enfrenta esta lucha tan compleja».
«Tratamos de que la comunidad en general se sume a esta pelea, que en realidad es contra una estructura cultural de mucho tiempo, que se produce en todos los estratos sociales y que siempre generó mucho daño, angustia y problemas», afirmó.
Asimismo, Bonicatto admitió que «no todos los casos se denuncian, sino que muchos se abandonan porque las personas no pueden salir del núcleo social: tienen problemas de vivienda, hijos, trabajo… Y la mujer vuelve y se revictimiza».
