Ayer, el Grupo «Solidad Ciudadana por el Medio Ambiente de 9 de Julio» (SOLCIMA) cumplió tres años de trayectoria al servicio de la comunidad nuevejuliense. Por este motivo, EL 9 DE JULIO dialogó con dos de sus integrantes, el arquitecto Ricardo Luna (R.L.) y el escritor Miguel Longarini (M.L.), quienes intercambiaron algunos conceptos acerca de la labor que realiza la entidad.
– Sería interesante recordar cómo surge, en esta comunidad, «Solidaridad Ciudadana».
– R.L.: Solidaridad Ciudadana surgió a partir de la inquietud de un grupo de vecinos, entre quienes se habían planteado las diferentes problemáticas del medio ambiente, especialmente en nuestra comunidad, que no se encuentra ajena a esas situaciones. Es un grupo ambientalista abierto a la comunidad, a los seres humanos que creen que vale la pena ser parte de un presente en el que tengamos bien claro que la naturaleza se la ama y se la respeta, porque somos una parte de ella. Enfermar la naturaleza es enfermarnos, dañarla es dañarnos.
Después de varias reuniones y de vincularnos con el grupo australiano ‘Vamos a limpiar el mundo’, del cual SOLCIMA es miembro; y de este modo nos presentamos en sociedad, en la Escuela 12 de Ciudad Nueva, donde expusimos nuestros fundamentos.
En estos años, la comunidad nos ha abierto las puertas. Las instituciones, empresas, comercios y, fundamentalmente, el periodismo. Hemos estado permanentemente en comunicación con las autoridades competentes, remitiendo notas para que, desde las áreas respectivas, tomen cartas en el asunto con la seriedad que corresponde.
SOLCIMA procura realizar una acción en favor del mejoramiento de la calidad de vida de todos, cuidando el medio ambiente, desde diferentes acciones, tales como, informar, anunciar, denunciar y concientizar sobre todo lo que sabemos que altere, atente, desinforme o dañe la vida de nuestro planeta. Por eso, seguiremos dando lo mejor de cada uno para seguir formando nuevas conciencias que generen más ambiente sano.
– La fecha de fundación de SOLCIMA coincide con dos motivos muy especiales, ¿cuáles son?.
– R.L.: Efectivamente, SOLCIMA fue fundada coincidentemente con la fecha en que se celebra Día Internacional de la Solidaridad. Al mismo tiempo, coincide con el día de nacimiento de la madre Teresa de Calcuta.
– A veces, se corre el riesgo de separar las problemáticas ecológicas de la situación cotidiana y vital de las personas y de las instituciones- ¿Qué opinión le merece esta realidad?.
– M.L.: Nosotros nacemos, vivimos, nos desarrollamos en un ambiente natural y ecológico por excelencia. Todos somos parte de la ecología, nada está separado.
Tal vez porque se nos ha enseñado mal o porque no se haya educado debidamente el tema de ecología, se toma a estos asuntos como si fueran otra cosa, algo distinto. La ecología y el medio ambiente tienen que ver con todos los aspectos cotidianos.
– ¿Cuál es el grado de compromiso que, según la apreciación de ustedes, tenemos los nuevejulienses en materia de ecología?.
– M.L.: No podemos hacer una evaluación aventurada; pero se observa que, en general, hay poco compromiso con la ecología. Hemos sido testigos de personas que han sido enviados a fumigar los cordones de las plazas, por ejemplo, utilizando glifosato. En estos momentos, el tema de los agrotóxicos está en el tapete. El glifosato, todos lo sabemos, no es inocuo. A raíz de una nota que enviamos, creo que tomaron un poco más de conciencia y de cuidados. Al respecto, es importante recordar que se ha sentado recientemente un precedente de que, para fumigar, hay que guardar una distancia de 1000 metros respecto del radio urbano.
Si bien se nos alienta en la tarea que realizamos, la participación ciudadana a nivel local, en el tema de la ecología, es poca. Tenemos una gran esperanza los jóvenes.
– R.L.: El año pasado, cuando la Escuela Técnica hizo la Feria de Ciencia y Tecnología, se presentaron varios trabajos de colegios de la zona que trataban acerca del tema de los agrotóxicos; sin embargo, este año, en la aludida Feria, no había ningún trabajo sobre el particular. Daría la sensación de que existió una bajada de línea para que no se realizarán trabajos sobre agrotóxicos, porque tal vez no sería bien visto por las autoridades competentes.
Hay que reconocer que, en este año, se trataron temas relacionados con los insecticidas en el uso doméstico.
– Esta falta de compromiso que observan, ¿tiene su proyección en la gestión gubernamental?.
– R.L.: Por supuesto. El poder político deja mucho que desear en cuanto a su intervención en ecología y medio ambiente. No se ha cuidado la salud de la comunidad y hubo poco compromiso por parte de los políticos que han pasado por el municipio.
El accionar de la Comisión de Ecología y Medio Ambiente del municipio siempre ha sido tibio, lo mismo en el área de Medio Ambiente municipal. Tal vez, por motivos internos que no alcanzo a comprender, el área municipal de Medio Ambiente no realiza con profundidad un trabajo de concientización de la comunidad.
– M.L.: Hace bastante tiempo se había encargado, al Municipio, el relevamiento de los tanques o cisternas de agua domiciliarios; porque hay lugares en los cuales se ha detectado que, en el sedimento que queda debajo de los mismos, se encontraron un cocquel de pesticidas, muy peligroso. Esto fue recomendado en el año 2007, en que vino el doctor Montenegro, un especialista en esta temática; pero hasta el presente no se efectúa ningún relevamiento por parte del municipio.
Sería muy bueno que desde del Concejo Deliberante se ordene la realización de este relevamiento, una iniciativa que sería importante llevar adelante.
– R.L. Solidaridad Ciudadana, en todas sus manifestaciones, no esta en contra de las plantaciones de soja, que le permiten a la Argentina tener un fuerte ingreso. Pero exigimos que se cumplan las reglamentaciones nacionales, provinciales y municipales, y leyes que se han fijado con respecto a la fumigación.
– Debemos tomar, todos juntos, conciencia de que, si no tomamos una participación activa, terminaremos deteriorando aún más el planera.
– R.L.: En efecto. Sobre este aspecto quiero recordar un texto, muy importante, escrito por el teólogo Leonardo Boff, titulado Carta de la Tierra: «Estamos ante un momento crítico de la historia de la tierra, una época en la que la humanidad escoger su futuro; conforma una alianza mundial para cuidar la tierra y cuidar unos de otros, o arriesgamos a la destrucción de nosotros mismos y de la biodiversidad de la vida». Este documento ya asumido por la UNESCO representa la nueva perspectiva planetaria, ética y psicológica de la humanidad.
