La comunidad de 9 de Julio no está ajena a los engaños que, en los últimos tiempos, se vienen realizando a través de los teléfonos celulares. La falta de regulaciones permite que circulen miles de líneas celulares que no están a nombre del usuario real.
Las personas inescrupu losas, aquellos que pretenden atrapar a los incautos para engañarlos han encontrado en la telefonía celular, especialmente, un campo propicio para quedarse con el dinero ajeno a partir de falsas campañas y falsos premios.
En estas últimas horas trascendieron distintos casos de personas que recibieron este tipo de mensajes y que se comunican con distintas entidades para prevenir posibles víctimas. No obstante, a veces ese tipo de precauciones parece llegar tarde y nuevos casos de personas engañadas salen a la luz.
De acuerdo con lo indicado por el doctor Esteban Naudín, abogado nueve- juliense, del estudio Gonzalez Frea-Naudín & Asociados, expertos en delitos virtuales, «la estafa puede efectuarse a partir de un SMS diciendo que el recepcionista ha ganado premios en dinero o en artefactos y les pide que llamen a un número celular».
«Al llamar -prosigue el profesional- a ese número una persona se identifica con un nombre falso y les dice que para que les entreguen su premio deben realizar depósitos de cantidades de dinero en bancos, envíos por empresas postales».
Efectivamente, anoche, un vecino de esta ciudad estuvo a punto de ser sorprendido por estos delincuentes. Alrededor de las 23 horas recibió un mensaje de texto a su celular, mediante en el cual se le daba cuenta de que había ganado un LCD de 42 pulgadas en un concurso realizando por una conocida entidad bancaria y para hacerse acreedor al premio debía llamar a un número telefónico en el cual se le informarían los detalles de la entrega.
«Al llamar -comenta el vecino- me dijeron que, efectivamente, el Banco me había otorgado ese premio. Como ese Banco cuenta con sucursal en 9 de Julio le consulté si podía retirar el premio en la misma y se me dijo que no, que lo debía retirar en la provincia de Santa Fe o bien se me sería enviado al domicilio».
Al querer acordar el envío del producto, quienes pretendían efectuar el engaño, le informaron que debía enviarle 200 pesos en tarjeta telefónicas de cualquier empresa.
«Me dijeron que, para pagar el franqueo del LCD, comprara tarjetas telefónicas de cualquier empresa. Que no las active y que les pase el código de las mismas. Una vez que realizara esa operación, registrarían mis datos personales y me enviarían el premio», comentó.
Afortunadamente, la persona fue alertada a tiempo y no accedió al engaño; pero, muchas personas, como consecuencia de los métodos de persuasión que utilizan estos defraudadores, termina accediendo.
OTRAS FORMAS
En otros casos, de los mensajes de texto se pasa directamente a un llamado en donde se le dice al presunto acreedor del premio que se le van a pasar los datos de una de las secretarias administrativas de la empresa, para que se deposite a su nombre una suma de dinero para poder comenzar el proceso de patentamiento de la unidad, en el caso de que el premio sea un automóvil. Lo cierto es que, el supuesto beneficiario, jamás verá el premio.
PARA TENER EN CUENTA
Es recomendable que, toda vez que se reciban mensajes de texto o SMS con campañas o premios, se los ignore. Si se trata de una llamada, siempre es oportuno cortar enseguida y, sobre todo, evitar brindar informaciones personales, tales como nombre, dirección, número de documentos o todo otro dato identificatorio.
