Anoche, invitado por la delegación local del Centro de Oficiales Retirados de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, disertó en esta ciudad el doctor Eugenio Lisciotto, Juez de Garantías del Departamento Judicial Mercedes.
En esta oportunidad, la exposición giró en torno al tema de «El Derecho Penal y la Inseguridad Social» y contó con la asistencia de abogados de esta ciudad, del presidente del Colegio de Abogados de Mercedes, autoridades municipales y policiales, miembros de entidades de esta ciudad y público en general.
En diálogo con los medios de prensa, el doctor Eugenio Lisciotto explicó que «la inseguridad social es un tema de candente actualidad».
Para el conferenciante, «todas las sociedades para que funcionen debe estar sujetas a las leyes que rigen a la sociedad; de lo contrario, si no hubiera leyes y normas, que imponen a todos los ciudadanos las conductas que deben seguir, cada persona haría lo que quisiese y la vida sería un caos».
«En mi exposición -añadió- quiero dejar en claro públicamente la responsabilidad que le compete a cada uno de los tres poderes del Estado, en la prevención del delito. La responsabilidad no es solamente del Poder Judicial, también le compete a los poderes Legislativo y Ejecutivo».
Según la apreciación del doctor Lisciotto, «las responsabilidades que la Constitución y las leyes le dan a cada funcionario, y que él mismo asume en el momento mismo en que jura; y ellos deben planificar y llevar a cabo, en lo que se refiere a la seguridad pública, todo el esfuerzo para poder darle la satisfacción a la ciudadanía de ver solucionada esta problemática que nos aqueja a todos».
En el mismo sentido, considero que «no hay fórmulas mágicas, esta situación no se arregla de un día para el otro; pero sería bueno ver, por primera vez, que se comienza a transitar un camino seguro donde al final del mismo a todos dé la garantía de que se podrá llegar al objetivo final: devolver a la sociedad la tranquilidad para vivir todos en paz, preocupándonos no solamente por nuestras cuestiones, sin estar condicionando la vida a lo que pueda suceder con la seguridad».
«Existe -dijo- una creencia generalizada en la población de que, determinadas situaciones de inseguridad social se debe a las rápidas decisiones de los jueces, que permiten que una persona, metafóricamente hablando ‘entre por una puerta y salga por la otra’; esto es producto del discurso, con la finalidad de quitarse el lazo del cuello propio».
En su opinión, «más que de reprimir a la persona, aquí se trata de pensar cuál es la política que debe aplicarse para que no se llegue a la comisión del delito, a través de la delicada tarea de la prevención».
«Existe una responsabilidad de dar protección a la sociedad, de no esperar que la sociedad sea dañada por la acción de un delincuente, ésta es la parte sustancial que los discursos y algunos medios masivos de difusión no le dedican un importante espacio de análisis», afirmó el magistrado, quien subrayó la importancia de «resolver el problema de la inseguridad social desde la faz preventiva, sin llegar a la agresión a un individuo de la sociedad».
