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jueves, noviembre 14, 2024

La sequía castiga a las lagunas bonaerenses

Por Fernando Delaitri (Agencia DIB).-

Las altas temperaturas y las escasas lluvias que se registraron en algunas zonas de la provincia de Buenos Aires en los últimos meses llevaron a poner “en alerta” las principales lagunas del territorio que, además de bajar considerablemente en su caudal de agua, vieron morir cientos de peces. Si bien las últimas precipitaciones ayudan a paliar en parte la grave situación de sequía, lo cierto es que se necesita de muchos más milímetros para recuperar la profundidad histórica de las lagunas de Junín, Chascomús, Lobos o Monte.

La poca agua no sólo afecta a la actividad deportiva y los fanáticos de la pesca, sino que también golpea de lleno en estas localidades que viven del turismo interno. En Junín reconocieron que bajó la cantidad de veraneantes en enero, mientras que en otras ciudades debieron suspender los habituales torneos de pesca.
“La sequía en Junín es importante. Si bien no es como la de 2008, hemos sufrido la muerte de carpas y pejerreyes”, explicó a DIB Viviana Lobato, integrante de la Dirección de Desarrollo de Aguas Continentales y Acuicultura del Ministerio de Asuntos Agrarios bonaerense. En esta localidad la laguna más afectada por la mortandad de peces fue la de Gómez, que pese a las últimas lluvias su profundidad ronda 1,60 metros, muy lejos de los 2,30 metros habituales. “Es una gran tristeza que se haya perdido mucho de lo trabajado en la siembra del pejerrey”, agregó la funcionaria.
De acuerdo a un relevamiento que hizo esta agencia por las principales lagunas, la situación es compleja y, en todos los casos, están a la espera de un “milagro de la naturaleza”. Un ejemplo es Lobos, la sequía y el intenso calor hicieron que el nivel de profundidad disminuya en los últimos meses, con mortandad de peces, sabalitos y algunos pejerreyes. “La laguna tiene una profundidad de 95 centímetros, más de medio metro de lo normal”, explicó a DIB Carlos Puldain, vicepresidente del Club de Pesca local. Si bien el dirigente dijo que las últimas lluvias trajeron algo de alivio, contó que debieron suspender todos los concursos que tenía previstos realizar.

CLANDESTINIDAD
Otra laguna que sufrió la mortandad de peces es la de Indio Muerto, ubicada a 20 kilómetros de Saladillo, que hoy tiene 60 cm de profundidad cuando años atrás tenía 1,40 metros. A la falta de lluvias (estiman que se necesitan unos 200 milímetros) se suman algunos canales clandestinos que hicieron productores para llevar el agua a sus campos. “La situación es casi desesperante, se está al límite y no sólo por la falta de lluvias. El problema también pasa por los 22 kilómetros de canales clandestinos”, contó Oscar Adorno, vicepresidente del Club de Pesca.
Según explicó, esa región bonaerense era de muchísimas lagunas, pero “las fueron” secando a todas. “Se hicieron canales por todos lados. Y pese a las promesas del Gobierno provincial, nunca se encontró una solución”, agregó Adorno, y ejemplificó: “En el camping del Club bombeábamos a 10 metros y hoy lo tenemos que hacer a 30 metros para sacar agua”.
Cuando las precipitaciones anuales son menores a mil milímetros y esto ocurre varios años seguidos los niveles de las lagunas bajan mucho, disminuyen los niveles de oxígeno y hay mortandades de peces. Desde el INTA de Chascomús explicaron que de las doce o trece especies que hay en las lagunas existen algunas que sufren más la falta de oxígeno y las altas temperaturas. Durante enero, esta laguna descendió 16 cm, y se encuentra apenas por encima de los 6 metros sobre el nivel del mar, uno de los registros más bajos de los últimos años. Aún así, la diferencia es de alrededor de 10 a 12 cm con la de la bajante de 1996, que permitió la “aventura” de que más de 300 chascomunenses la cruzaran a pie, y de 5 a 6 cm respecto de marzo de 2009, cuando por segunda vez se realizó la caminata.
La Laguna la «Salada Grande», que está entre Lavalle y Madariaga y posee una extensión de aproximadamente 8 mil hectáreas, tiene parte con espejos de agua con profundidad, en algunas partes, de medio metro. Y la de Monte, a 150 metros de la costa el agua llega a unos 50 cm. En esta zona, el nivel de lluvia anual ronda los mil milímetros, pero en 2011 rondó la mitad. (DIB)

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