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Santos Abel de la Plaza: Símbolo de la rectitud

[5 de diciembre de 2009]

-Nieto del Capitán Alejandro de la Plaza, integrante del Ejército fundador de 9 de Julio y Guerrero del Paraguay.

-Se recibió de Escribano Público Nacional a los 24 años.

-Fue Jefe del Registro Civil de 9 de Julio entre 1945 y 1946

-Al constituirse en 1946 la Comisión de Nacionalización de los Servicios Públicos cumplió con las funciones de Presidente.

-Ejerció la Presidencia del Club Atlético 9 de Julio. (1957-1963)

-Se desempeñó como presidente de la Delegación 9 de Julio del Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires. (1960-1969/ 1974-1978)

-En el lapso 1958-1962 ocupó una banca en el HCD en representación de la Unión Cívica Radical.

-En 1963, resultó electo Intendente Municipal por la Unión Cívica Radical del Pueblo. (1963-1966)

-Fue profesor de la ex Escuela Nacional de Comercio y Anexos.

-En su juventud había practicado fútbol y tenis en Atlético 9 de Julio.

El Escribano Santos Abel de la Plaza, perteneció a una familia que entroncaba directamente con quienes lucharon en la avanzada militar de la pampa en lo que atañe a estos parajes. Había nacido el 11 de junio de 1905 en 9 de Julio. Era el menor de una escala de ocho hermanos del matrimonio formado por Alejandro de la Plaza y Rosario Illescas. Su abuelo el Capitán Alejandro de la Plaza integró el Ejército de Línea comandado por el Coronel Julio de Vedia, fundador de 9 de Julio y fue Guerrero del Paraguay, en esa contienda bélica perdió la vida. Contrajo matrimonio con Noemí Judith Luchini, de esa unión nacieron Abel Alejandro, casado con Marta E.  Di Costa, Jorge Antonio y Silvia Noemí casada con Angel T. Palacios.

Después de recibirse de Escribano Público volvió a su terruño y se brindó a la sociedad sin retaceos. Figura relevante del Radicalismo, en el cual tuvo una larga militancia, ocupando cargos partidarios y electivos. Al frente de la administración municipal en la etapa que le tocó actuar, administró con corrección y con extrema sobriedad en el manejo de la cosa pública. En lo relativo a su profesión supo ganarse la confianza vecinal, pues siempre puso de relieve una firme rectitud. A principios de la década de 1980 el Colegio de Escribanos le brindó un justiciero homenaje, por su larga permanencia en el ejercicio de la profesión y por su ejemplar conducta con que la ejerció.

La Profesión

Luego de completar sus estudios primarios y secundarios en el Colegió Cavallari ingresó a la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Buenos Aires graduándose de Escribano Público  Perteneciendo a una familia humilde, sus hermanos lo ayudaron a finalizar sus estudios. En los primeros tiempos, en el desempeño de su profesión ocupó un espacio en el Estudio Jurídico de su hermano el Procurador Universitario  José María de la Plaza, hasta que instaló la Escribanía en su domicilio particular de la calle Libertad. Uno de sus primeros empleados había sido el extinto dirigente gremial y político Jesús Abel Blanco. Ejerció la profesión por más de cincuenta años. En junio de 1945, la Intervención de la Provincia de Bs. As. lo designó Jefe del Registro Civil, delegación 9 de Julio. Fue también, Encargado del Registro de Créditos Prendarios Asimismo, le cupo actuar en su condición de Escribano, en cuestiones políticas. A la sazón, en mayo de 1936, acudió al despacho del Comisionado Municipal Pedro Sánchez Echagüe conjuntamente con los concejales electos de la Unión Cívica Radical Manuel Osores Soler, Manuel Arce. Ambrosio Martínez y Ezequiel Velez, a los efectos de dejar constancia en un acta, la gestión realizada por los mencionados ediles ante el Comisionado Municipal, solicitándole la entrega de la comuna al Radicalismo. Hecho que nunca ocurrió. En 1960 fue elegido como primer presidente de la Delegación 9 de Julio del Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires y desempeñó otro mandato en 1974-1978. Durante su gestión concretó que el Colegio de Escribanos construyera con fondos propios el edificio de la Escuela Nº 47 de El Chajá, inaugurado el 7 de diciembre de 1963. En el miso año se realizan las gestiones para la compra del inmueble donde hoy se encuentra el edificio de la Delegación, frente al Teatro Rossini,  que se formalizó en 1965. Del mismo modo, integró el Tribunal de Etica del Colegio.

En la Unión Cívica Radical

Desde joven militó en el Radicalismo, que se prolongó hasta el final de sus días  El 19 de octubre de 1934 fue uno de los fundadores de la Biblioteca » Dr. José Bianco » anexa al comité. Durante muchos años fue un centro de cultura que hizo honor a 9 de Julio, desarrollando congresos culturales, actos públicos literarios y en ocasión del cincuentenario de la muerte de Domingo Faustino Sarmiento organizó un homenaje y colocó una placa recordatoria en la calle Sarmiento casi Vedia.  En 1935, integró la lista de candidatos de la UCR a consejeros escolares titulares. El Dr. Osores Soler encabezaba la nómina de candidatos de concejales municipales. Ese mismo año. Por los mismos motivos que inspiraron la creación de la biblioteca » Dr. J. Bianco » para difundir cultura y educación, se fundó el  » Colegio del Pueblo «, en especial, para adultos, en  horario nocturno. De la Plaza participó  eficazmente en la formación de ese centro educativo y se desempeñó en calidad de profesor. Desde 1958 hasta 1962, ocupó una banca en el HCD, donde le tocó actuar en un momento en que se produjo un conflicto de poderes en la administración Municipal de Adolfo R. Poratti. En 1963, resultó electo Intendente Municipal en representación de la Unión Cívica Radical del Pueblo, mandato que finalizó cuando se produjo el Golpe de Estado de junio de 1966, que derrocó al Presidente Arturo U. Illía. No obstante el corto período al frente de la Comuna, desarrolló una tarea caracterizada por la transparencia, por la recuperación del parque automotor y la realización de estudios y de labores de infraestructura que años más tarde posibilitaron la construcción de muchas obras públicas.

En el Club Atlético 9 de Julio

Fue un destacado deportista que se inició en la práctica del fútbol, a los 17 años, había integrado la primera división, junto a P.J. Callegaro, P. Hornos, R. Failache, A. Pereyra, J. Ezquerra, F. Rotundo, E. Núñez, J. Arzuaga, J. Siviero, Oscar Molteni, R. Reuberling, E. Benedetti, O. Adobato, M. Santillán, R. Macchioni. D. Gineis, Rodoni entre otros. En la década de 1930 sobresalió en la práctica del Tenis en las canchas ubicadas en Salta y Lagos, obteniendo varios torneos de la especialidad.  En febrero de 1931, integró una delegación de Tenis  que fue a Bragado, era la primera vez que el club destacaba tenistas a otra ciudad. Lo acompañaron  Lisazo y Pellegrini. Suplentes Raggio, Ciappa y Ferraro. En 1940 había ganado invicto un torneo de singles de primera categoría, inscribiendo su nombre en la Copa Challenger Intendencia Municipal de 9 de Julio, que se jugaba todos los años en Atlético. Unido por un vínculo muy fuerte con Atlético, colaboró con la Biblioteca del club » Juan Bautista Alberdi «, que más tarde se denominó » Anastasio Prieto». En 1941, integró la C.D. presidida por Ramón N. Poratti y, en 1957 asumió la presidencia de la entidad hasta 1963, año en que resultó electo Intendente Municipal. En su paso por la institución, dejó la impronta de respeto, seriedad, austeridad y el afán de que el club marchara hacia el progreso. En octubre de 1961,  en el Club Libertad , compartió un acto de homenaje a los ex futbolistas Carlos Izaguirre y Vicente Cussatti, fue un momento lleno de recuerdos y de emoción, participaron de una cena criolla los amigos de la guardia vieja  y otros de esa época.  Dejaron sus conceptos,  además de De la Plaza, José Doga, José Lagomarsino, Heriberto Camou, Francisco Benedetti, el Dr. Mariano de Carlos Casares, y Ramón Guerriere, gestor del homenaje. Los homenajeados recibieron pergaminos y medallas, agradeciendo cada uno de ellos, con evidente emoción.

En otras entidades

Comprometido con las instituciones y el bien común, participó entusiastamente en sociedades civiles, sociales, culturales y Deportivas. En 1928, formó parte de la comisión directiva del Club Social y Deportivo Remo y Natación, ocupando el cargo de protesorero. La presidencia la ejerció el Dr. Leo Antunovich. Igualmente, lo hizo en el Centro Recreativo Orfeón 9 de Julio. Formó parte del Tribunal de Honor de la Asociación de Bomberos Voluntarios de 9 de Julio.

Hizo su paso por el periodismo, junto a sus hermanos: José María de la Plaza que ejerció la dirección del diario » El 9 de Julio » y Arturo de la Plaza que se desempeñó como administrador del mismo vespertino. Colaborando en otros periódicos, con notas políticas, sociales y culturales. Como así también, en la ex Escuela Nacional de Comercio dictó la cátedra de Instrucción Cívica.

En septiembre de 1943 fue designado Secretario del Consejo Escolar intervenido por el Gobierno de facto y en octubre de 1944 asumió la presidencia del Consejo por renuncia de Ider Amenávar, hasta 1945. En setiembre de 1944 integró la Comisión Pro Monumento al Gral. José de San Martín. En 1946, 9 de Julio se debatía en una lucha contra las tarifas que imponían las compañías prestadoras de los servicios de electricidad y de teléfonos. En ese contexto, se resolvió designar a conocidos vecinos a fin de que constituyeran la Comisión de Nacionalización de los Servicios Públicos, siendo elegido presidente, la personalidad que hoy ocupa esta página.

Palabras Finales

Santos Abel de la Plaza falleció en esta ciudad, el 7 de mayo de 1983. En el acto de sus exequias, dejaron  oraciones fúnebres, el Escribano Jorge Cardinal en nombre del Colegio de Escribanos, Horacio C. Silvestre en representación del Club Atlético 9 de Julio y Antonio A. Rodríguez por el comité de la UCR y en representación del ex Gobernador de la Provincia de Buenos Aires Dr. Anselmo Marini. Más allá de las virtudes destacadas en su sepelio, quedó para siempre vigente en 9 de Julio su imagen de hombre íntegro y probo, comprometido con su comunidad, desde el lugar donde le tocara participar.

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