18.3 C
Nueve de Julio
jueves, noviembre 13, 2025

Comunicado de la Biblioteca Popular El Provincial

El motivo de este escrito es dar a conocer algunas de las formas de intervención del gobierno municipal sobre las instituciones culturales y educativas del interior de nuestro partido. Hablamos en nombre de nuestra biblioteca, la Biblioteca Popular El Provincial -sepan disculpar el carácter general de la primera línea de esta introducción- pero creemos que nuestra situación es extensiva a gran parte de las instituciones sociales que actualmente trabajan en 9 de julio. Es necesario dar a conocer algunos pormenores de lo que generosamente llamaremos “política cultural” del gobierno municipal con la intención de construir una memoria institucional y colectiva de nuestra biblioteca y de las tensiones que la atraviesan, relación con -en este caso- las diversas mediaciones municipales.
Hace ya un tiempo veíamos con preocupación las noticias de sucesivas “fundaciones” de bibliotecas en distintos pueblos del partido. Parecía parte de un discurso mágico según el cual, de golpe y porrazo, una biblioteca era inaugurada en algún pueblo vecino: lo que a nosotros nos costaba tanto trabajo y dedicación diaria, la “gestión” municipal lo resolvía en una rápida visita rural. Estas nuevas bibliotecas recibían la denominación de Bibliotecas Rurales Argentinas y algo más (luego nos enteraríamos de qué más). Maravillados por semejante capacidad instituyente del gobierno municipal y, sepan disculparnos una vez más, descreyendo un poco de que semejante acontecimiento fuera tan sencillo, iniciamos la tarea de averiguar algo más. No fue una gran investigación la que nos pone en conocimiento de una Organización No Gubernamental llamada Bibliotecas Populares Argentinas. Menos complicado fue entrar a su sitio web y ver que las dichas “bibliotecas” se ofrecían a todos quienes completaran un formulario solicitándolas: lo que el gobierno municipal llamaba “gestión” no era ni más ni menos que un pasamanos y lo que llamaban “biblioteca” eran cajas llenas de libros y alguna que otra estantería para contenerlos: seamos generosos, la mayoría de nosotros llama biblioteca a esos estantes que unos sobre otros contienen libros y otras cosas en nuestros hogares, pero lejos está esto de referirse a las instituciones que llamamos bibliotecas comunitarias, populares o públicas. Alguna vez dijo con agudeza Unamuno: Tendría yo que saber, ante todo, qué quiere usted decir con eso de formar biblioteca y para qué la quiere usted y cuál ha de ser el uso que haga de los libros que la compongan. Porque no le supongo en el error vulgar de que un libro es ante todo para ser leído, y mucho menos para ser guardado.
Algunos días atrás -finalmente- funcionarios municipales se comunicaron con nosotros para sí: ofrecernos fundar una biblioteca en nuestro pueblo. Nos dijeron que nos llamaban porque “sabían que teníamos una biblioteca chiquita” en El Provincial y quizá nos interesaría la propuesta. Aclaremos que nuestra biblioteca lleva más de siete años de actividad, que cuenta con más de dos mil libros en su fondo bibliográfico, colecciones audiovisuales, ludoteca, actividades que van desde charlas y talleres hasta clases de apoyo escolar y circo entre otras. Que actualmente formamos parte de ella profesionales de la educación y la bibliotecología y que realiza diferentes convenios con instituciones culturales y educativas locales, provinciales y nacionales entre las que se encuentran el programa de Alfabetización de Adultos del Ministerio de Educación de la Provincia de Buenos o la participación como socios adherentes de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP).
La centralidad del libro en una biblioteca popular es estéril sin las mediaciones necesarias que faciliten el acceso al mismo. Fortalecer esas mediaciones constituye uno de nuestros objetivos principales. La democratización del acceso a la cultura consiste sobre todo en crear las condiciones materiales pero también afectivas y de cuidado que permitan la construcción de un espacio plural y acogedor para el desarrollo de las posibilidades que a cualquier niña, niño, adolescente o adulto le corresponden de derecho propio.
Resumamos los detalles, la propuesta municipal consistía en admitir la inexistencia de la Biblioteca Popular El Provincial y la consecuente fundación de otra biblioteca que llevaría la denominación de Bibliotecas Rurales Argentinas y dos placas más: una con la mención a la Municipalidad de 9 de Julio y otra con el estreno del nombre de la nueva biblioteca: porque, claro, no hay nacimiento sin bautismo. La propuesta no era más que un caballo de Troya, un regalo muy caro, y sabemos que con este tipo de regalo -como con el reloj cortazariano- tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños. Estas condiciones previas para recibir la donación se incrementaron cuando nos acercamos a retirar los formularios correspondientes pero ya es suficiente con lo que hasta aquí mencionamos.
Exageramos al llamar “política cultural” a una serie de acciones aisladas que el municipio lleva adelante, carentes de todo tipo de sustento cultural o educativo excepto el prejuicio ilustrado de que -en este caso- el libro se convierta en suficiente potencia fundadora. Desconocen ampliamente los fundamentos de una biblioteca abierta a la comunidad. Ese desconocimiento los lleva a insultar el trabajo de mucha gente y de instituciones que como la nuestra sostienen día a día sus actividades pese a la ausencia completa de financiamiento municipal y a este tipo de groseras intervenciones. Sería deseable que sus intervenciones nos acercaran y facilitaran el acceso a instancias provinciales o nacionales de financiamiento, a programas serios de acción comunitaria o de extensión cultural.
Nuestro trabajo exige otro trato y otra apertura por parte de la administración local y reclama la necesidad de comprender las funciones y alcances de una institución como nuestra biblioteca con la esperanza de que dicha comprensión permita idear un futuro posible que se acerque a la necesidades reales de nuestras instituciones.
Mauricio Rongvaux Presidente

Más noticias