Hace más de cinco años conseguir un lugar para estacionar en las manzanas más céntricas de la ciudad de 9 de Julio no era un problema y se podía cumplir con esa costumbre de los nuevejuliense de bajarse casi en la puerta del destino.
Sin embargo, los tiempos han cambiado y así como se observa un crecimiento urbanístico en inmuebles
En los últimos años el crecimiento del parque automotor ha sido considerable y es así que, a media mañana, los automovilistas encuentran un lugar para detenerse a tres cuadras de la Plaza Belgrano.