COMERCIO ELECTRÓNICO: CÓMO REALIZAR COMPRAS SEGURAS Y RECLAMAR ANTE INCUMPLIMIENTOS
El comercio electrónico es una transacción o actividad económica que se realiza a través de un medio electrónico o digital (por ej. páginas web en internet) que posibilita la oferta y adquisición de productos y servicios, a distancia, entre un sujeto proveedor (por ej. un vendedor) y otro consumidor (o usuario).
¿Hay leyes que lo regulen?
Al tratarse técnicamente de contratos de consumo, el Código Civil y Comercial de la Nación los regula (en su Libro Tercero, Título III, a partir del art. 1092), como así también la Ley de Defensa del Consumidor y las leyes relativas a los datos personales. Toda esta legislación en su conjunto protege la relación (en tanto vínculo jurídico) entre los proveedores de productos o servicios y los consumidores o usuarios.
¿Qué puedo hacer ante un problema relacionado con la compra de un producto o servicio a través de internet?
Si el producto o servicio no cumple con tus expectativas, el primer paso es dar aviso al proveedor a través del mismo medio por el cual te contactaste y manifestarle lo que pasó.
Si de ese modo no podés solucionarlo, consultá a tu abogado de confianza para que utilizando las herramientas que confiere la normativa de nuestro país, te asesore e inicie, en su caso, el reclamo pertinente ante la Oficina de Defensa al Consumidor de tu localidad. Si sos proveedor, también podés asesorarte para una adecuada defensa de tus derechos.
¿A qué le tengo que prestar atención cuando hablamos de comercio electrónico?
Es importante que la información del producto sea veraz, eficaz, suficiente y entendible, para que el producto o servicio sea efectivamente lo que pretendés adquirir. Además, es necesario verificar la identidad del proveedor asegurándose de poder contar con un medio de contacto rápido y eficaz, consultando a su vez las opiniones de otros usuarios y sus calificaciones a partir de experiencias previas.
Al momento de decidir comprar, verificá si el producto está en stock, el plazo estimado de entrega y las políticas de cambio o devolución. Cuando vuelques tus datos personales y la forma de pago, verificá que se trata de una página web segura, verificando que el nombre del sitio web cuente con la sigla “https” al comienzo.
No dejes guardados tus datos personales en ninguna plataforma para evitar el uso indebido de los mismos por terceras personas. En el caso de las plataformas digitales de compra, evitá dejar grabados tus datos de pago para evitar el cobro automático de productos o servicios que no adquiriste.
