El gobernador bonaerense Axel Kicillof criticó con dureza a la gestión de María Eugenia Vidal en torno a la deuda que calificó de «insostenible», al tiempo que se mostró en sintonía con la estrategia nacional y dijo que le pidieron a los tenedores que pospongan el pago de capital, no de intereses, hasta el 1° de mayo.
En una serie de tuits que sirvieron de catarsis, Kicillof volvió a ahondar en la grave situación en la que recibió la provincia al hablar del «catastrófico endeudamiento y la situación de caja» que encontró su gestión.
Según explicó, la deuda se multiplicó en su magnitud cuando se la mide en dólares: pasó de US$ 9.362 millones en diciembre de 2015, a 11.263 millones en 2019. «La parte de la deuda en moneda extranjera creció del 57% al 82%. Así, medida en su totalidad en pesos, se multiplicó por 5. Por eso decimos que la ex gobernadora fue la mejor alumna Macri», lanzó.
De esta manera, según explicó el mandatario el peso de la deuda en el PBI creció del 6% a casi el 10%, como así también la relación entre deuda y recursos totales, del 44% al 80%. «Cuando asumió Vidal tuvo que afrontar durante su mandato vencimientos por 5.400 millones, mientras que en el período 2019 a 2023 vencen 8.800 millones», destacó.
El Gobierno confirmó oficialmente este martes que no podrá hacer frente al vencimiento de deuda del 26 de enero por lo que propuso a los acreedores negociar y aplazar el pago hasta el 1° de mayo. Se trata del bono Buenos Aires 2021 (BP21, emitido en 2011), bajo legislación de Nueva York, por US$ 275 millones, con vencimientos escalonados. Para lograr dicha postergación, la Provincia necesita la aprobación de los tenedores de al menos el 75% del capital en circulación de dichos bonos antes del 22 de enero de 2020. «La deuda de la provincia, como la dejaron, es insostenible. El año pasado los vencimientos fueron de 66 mil millones de pesos, durante este año vencen 84 mil millones de intereses y más de 140 mil millones de capital. Impagable», agregó Kicillof en la red social.
En ese sentido, frente a lo que consideró «una deuda elevadísima y caja insuficiente», el mandatario confirmó que se le pidió a los tenedores de deuda que pospongan el pago de capital, no de intereses, hasta el 1 de mayo. Y se mostró alineado con el Gobierno de Alberto Fernández, pese a las versiones periodísticas que hablaban de cortocircuito por la decisión de no auxiliar económicamente. Y dijo que esta medida fue «en total consonancia y coordinación con la política de administración de la deuda del Gobierno Nacional y con el objetivo de conseguir el crecimiento de la economía, mayor inclusión social, y sostenibilidad de las condiciones financieras». (DIB) FD
