Un recorrido de atletas el 1ro. de enero
El Año 2020 comenzó con una carrera en la que no hubo ningún ganador en particular. Se trata de la «La carrera de Walter», una prueba en la que se compartió la amistad recibiendo el año nuevo, con un recorrido emprendido por 65 atletas en una distancia de 8,5 kilómetros hasta llegar a Plaza Belgrano.
Walter Esteban tiene 59 años. Fue camionero y durante muchos años estuvo abocabo a los viajes al Norte de nuestro país (Tucumán, Salta y Jujuy). Nunca antes había practicado ningún deporte, hasta que hace 6 años comenzó a incursionar en el atletismo.
A Esteban se le ocurrió hace cuatro años empezar a salir por su cuenta cada 1ero de año a la hora 9. «Cuando había un silencio total en la ciudad, pasaba casa por casa a saludar a mis amigos, atletas o no atletas, pegando el grito de Feliz Año Nuevo», explicó Walter Esteban está convencido que más allá que las redes sociales «están buenísimas», está convencido que no va a reemplazar al saludo «personal, cara a cara, el beso y el mimo: eso me puede».
El año pasado encontró eco en otros 13 atletas que se sumaron, para alcanzar un total de 14 quienes saludaron a sus amigos. Todos ellos finalizaron en Plaza Belgrano.
Este año acompañaron muchos más. A Walter Esteban se le ocurrió hacer una medalla, porque le gusta hacer trabajo en herrería, como así también se decidió encargar unas 50 remeras. Se quedó corto porque fueron 65 en total. «También se sumaron mis nietos y sus hijas, tengo que hacer 19 medallas más».
Walter Esteban explicó que el recorrido suyo partió desde Eva Perón y J. B. Justo, pasando por Ag. Alvarez, Garmendia, Tomás Cosentino, Urquiza, Antonio Aita, Avenida Mitre hasta Plaza Belgrano. No pudo pasar por todas las casas como otros años.
«Soy una persona grande que a esta altura de la vida le doy mucho valor a lo sentimental. La familia y la amistad tiene un valor incalculable. Me esperaron mis nietos y eso me dio mucha alegría», reconoció.
Walter Esteban se sintió muy contento por el reconocimiento que le hicieron al llevar adelante esta iniciativa que prendió en muchos nuevejulienses. «Esta fue una caricia al alma», señala.
Hubo gente que le pidió arrancar con el recorrido a las 9. Walter aclaró que el espíritu es hacerlo temprano. Se mostró muy contento por correr todos juntos, superando las expectativas más allá de la organización. «Estoy muy feliz, esto se convirtió en algo inolvidable», concluyó.
