El Centenario de la Escuela N° 24 «Ricardo Gutiérrez» fue celebrado el sábado 3 de diciembre con profunda emoción por la comunidad educativa. El cumpleaños había sido el 30 de noviembre y la fiesta tuvo lugar tres días más tarde, en una jornada que contó con la participación de alumnos, docentes, directivos y autoridades.
Se hizo presente el Intendente Municipal Cdor Mariano Barroso, acompañado por funcionarios, la Inspectora Jefe Distrital Liliana Vallabriga, demás inspectores, concejales (entre ellos la Presidenta Dra María José Gentile), consejeros escolares (con la presencia de la Presidenta Marisa Poratti).
La escuela salió a la calle para celebrarlo con todo el barrio Luján. Allí, sobre la Av. Eva Perón (ex Río Paraná, entre Gutiérrez y Heredia) se preparó el acto, con un edificio ornamentado para la ocasión con la frase «100 años caminando juntos dejando huellas, recuerdos y momentos inolvidables».
Se descubrieron dos placas para dar testimonios al centenario de la Escuela 24 que comenzó su actividad en 1916. La bendición estuvo a cargo del Pastor Emilio Peralta. Se recordó con un respetuoso minuto de silencio a quienes pasaron por la institución y ya no están.
La Directora Silvina Pérez brindó emotivas palabras, agradeciendo a las escuelas que acompañaron a través de las banderas de ceremonia en un momento especial de encuentro del ayer y el hoy con el recuerdo de los que fueron y la acción de quienes se encuentran en el presente, poniéndose en evidencia.
«Se trata de festejar un pasado y un presente que nos llena de orgullo, que nos impulsa a seguir trabajando y a seguir construyendo. Esta escuela se asemeja a los caminos en los que no sólo es importante llegar sino el trayecto mismo, con prácticas democráticas, en un único clima posible de diversidad, tolerancia y respeto por el otro», remarcó la Directora recordando y agradeciendo a quienes consolidaron la Escuela y se sobrepusieron a las dificultades, reconociendo a quienes predecieron. «El resultado es una conjunción y todos fueron necesarios», expresó.
Destacó Silvina Pérez la importancia del conocimiento como prioridad en la agenda pública. Por último habló de la importancia de los alumnos: «una escuela centenaria sólo es posible porque existen ellos: nuestros alumnos».
La ex docente, ex directora de la Escuela, y actual Inspectora Iris Estelrich dejó testimonio de su paso por la institución, llegó a la Escuela cuando se organizaban los festejos del 75° aniversario, imaginándose de cómo serían los 100 años y reconoció que nunca se hubiera imaginado tener la oportunidad de hablar en el Centenario como ex docente.
«Aquí tengo los recuerdos más queridos de mi profesión. En aquel entonces la Escuela era muy distinta con cuatro salones, con la división de un tabique de madera», recordó entre otros detalles de un barrio que tenía una calle de tierra, compartiendo edificio con el Jardín 913 y la higuera donada por Antonio Aita, traída desde San Juan. «El célebre árbol se convertía en cómplice de las travesuras de los chicos».
Un momento emotivo del discurso fue el recuerdo del tironeo del guardapolvos de la docente Estelrich y la cara de alegría de los chicos al resolver su tarea. «Hoy me siguen saludando con las palabras mágicas de Seño, Señorita, transformados en hombres y mujeres y con orgullo e presentan a sus hijos. La comunidad pujante logró sus objetivos, logrando ampliar el edificio y concretar proyectos con el el apoyo de la Sociedad de Fomento», explicó Estelrich destacando el rol de los alumnos. «En esta escuela estrechamos lazos y estrechamos raíces. Cada uno de los que llega siente ese espíritu», indicó reconociendo que aprendió y compartió a la par de los alumnos, con una relación que lleva de la Escuela en lo más profundo de su corazón.
En el patio se descubrió un mural del Centenario. Se reconoció a los alumnos con trabajos destacados en el logo del Centenario, el elegido correspondió a Francina Cañas. Se reconoció a docentes, ex docentes y cooperadores. En especial se dio testimonio del paso por la institución a la Presidenta de la Cooperadora Mirta Pezzi, a la auxiliar Susana Damico y al profesor Javier Sampietro por su larga trayectoria en la institución.
Fueron reconocidos ex alumnos y entre ellos el de más experiencia en la vida, el Profesor Horacio Vizzón recordó aquellos años, ingresando en 1935 a la Escuela. Pidió la palabra y dio una lección de aquellos años que permanecen en sus recuerdos del barrio que se conocía como Villa Garibaldi, un barrio en el que nació el Club Agustín Alvarez. Su madre fue directora del establecimiento.
En la «Cápsula del tiempo», se guardaron notas, material que refleja el Centenario, para ser abierto dentro de cinco años y que los alumnos de 1er año puedan leer el testimonio que refleja el acontecimiento. En el cierre del acto habló la Inspectora Jefe Distrital Liliana Vallabriga, dando por concluido el acto.
De esa manera con el aporte de gente que pasó en distintas etapas en el establecimiento, se celebró el Centenario de la Escuela 24. Por la noche, en el Salón del Club El Fortín tuvo lugar la cena para concluir con la celebración de tan importante evento.
