Toda la atención periodística de buena parte de la región oeste y sudoeste de la provincia de Buenos Aires se centró este martes sobre la pequeña población rural de Girodías, en el distrito de Trenque Lauquen, al ampliarse la repercusión de que el agua ingresaba al casco urbano, desde el domingo, y ponía en riesgo las condiciones de habitabilidad de unos doscientos vecinos. La rotura de un tapón en uno de los canales que permiten el escurrimiento de aguas, había provocado el problema, lo que obligó a una nueva y directa acción de la Dirección de Hidráulica, a partir de un pedido que se realizó desde distintos estamentos políticos de la capital del distrito, muy especialmente del Departamento Ejecutivo.
Una máquina de la repartición bonaerense procedió a restituir el taponamiento, lo que en las últimas horas de la tarde hizo que se recuperara – en parte – la tranquilidad de los vecinos.
Girodías está ubicada al sur de Trenque Lauquen y en el límite con los distritos de Daireaux y Guaminí. A escasos metros de la planta urbana se encuentra la traza de la Ruta del Cereal, la que viene siendo reparada sistemáticamente por las autoridades del distrito, a los fines de permitir la transitabilidad.
El tapón se rompió por la presión del agua, cuyo caudal es importante o por acciones protagonizadas intencionalmente. Desde hace dos meses hay clima de tensión entre Trenque Lauquen y Daireaux. En este último caso, muy especialmente, por la acción de productores que insisten en la necesidad de romper con ciertas decisiones adoptadas por la repartición que regula la política hídrica en territorio bonaerense. Ello ha motivado conflictos que llegaron a la Justicia ordinaria. Hubo denuncias por parte del municipio del que depende Girodías, hasta que la semana anterior se resolvió realizar una reunión para encontrar algún punto de entendimiento en la ciudad de La Plata.
El Director de Servicios Viales, Alberto Rodríguez Mera, fue el primero en salir a los medios y conversar con los vecinos de Girodías. Calificó a la situación como muy preocupante y anticipó que había requerimientos de apoyo técnico a la Dirección de Hidráulica. Al mediodía, el secretario de Gobierno, doctor Gustavo Marchabalo, sobrevoló la zona y se puso al frente del operativo que se desarrolló para recomponer la situación a su estado anterior. Mientras tanto, el intendente Fernández se encontraba en La Plata, donde también fue siguiendo con partes que le proporcionaban desde el lugar afectado, le evolución del panorama.
