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viernes, marzo 29, 2024

El Gobierno aplica un plan netamente keynesiano

-¿Está caro el dólar? -El dólar libre se encuentra igual o por debajo de los niveles de fines de noviembre de 2015, una vez que se corrige por la inflación acumulada desde entonces. La inflación acumulada usando el índice de la ciudad de Buenos Aires y suponiendo un 5,5% para abril da 22,6%. El dólar ahorro valía, el 30 de noviembre, 9,69 pesos más un 20% de retención; costaba así $ 11,62 y actualizado por la inflación equivale a $ 14,25, o sea, apenas un 2,4% más bajo que el dólar actual libre, que se ubica en $ 14,60. La comparación con el dólar tarjeta es mucho peor, ya que la retención era de 35%, lo cual actualizado a hoy da $ 16,03, un nivel mayor en un 9,8% que el actual ($ 14,60). El contado con liqui (al que entraban las importaciones en el margen) estaba el 30 de noviembre en $ 14,45, prácticamente igual al dólar nominal de hoy, o sea que en términos reales es mucho más barato importar ahora. Concluyo que la Argentina es un país tanto o más caro que lo que era en noviembre de 2015.

-Entonces, ¿por qué está tan barato el dólar? -Para contener la inflación sin bajar el déficit fiscal, la estrategia ha sido atar el dólar con dos piolines: deuda externa y Letras del Banco Central (Lebac). Estas últimas dan tasas de interés muy altas que no hacen atractiva la tenencia de dólares. El costo es que aumenta exponencialmente la deuda interna del Gobierno. La deuda externa, desde esta semana, hace realidad la amenaza de una «lluvia de dólares» que al aumentar la oferta haga bajar su precio. El costo es que aumenta, también exponencialmente, la deuda externa del Gobierno. El problema es que el dólar barato, unido a las inundaciones, el déficit fiscal y la caída del mercado brasileño, ha eliminado el superávit comercial desde 2015, o sea que por el momento hay pocas posibilidades de repago normal de la nueva deuda externa. Eso hace que las tasas sean altas, lo que agrava el problema. El mantenimiento del déficit fiscal, por otro lado, elimina la posibilidad de repago de las Lebac, lo que también dificulta al BCRA el refinanciar el stock de esas letras, que está colocado prácticamente a 40 días.

-¿Cuál es el eje de la política económica del Gobierno? -Creo que es un plan netamente keynesiano, donde los conceptos «ajuste fiscal y estructural» y «sector privado» prácticamente no se mencionan. Lo que más se escucha es que vendrá una «lluvia de dólares para financiar obras públicas». No estoy de acuerdo con la estrategia elegida. Pero no me queda claro si el Gobierno quiere esto o es lo único que puede hacer, dada la falta de apoyo político en el Congreso para hacer los cambios mucho más profundos que se requieren para corregir nuestros graves desequilibrios.

Dr. Carlos Rodríguez, Ph.D. in Economics, University of Chicago; Rector de la Universidad del CEMA.

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